Los negocios no obligados a cerrar también lo hacen a pesar de su temor a no poder acogerse a las ayudas del estado de alarma
MADRID, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los gestores administrativos han recibido una "avalancha" de Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), así como bajas laborales y cierre "masivo" de negocios, desde que se decretara, el pasado 15 de marzo, el estado de alarma.
Así lo ha trasladado el Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos en un comunicado en el que afirma estar trabajando "a contrarreloj" para responder "de forma eficaz" a la demanda de sus clientes, en su mayoría autónomos y pequeñas y medianas empresas (pymes) y, sobre todo, en el sector comercio y hostelería, el más afectado por esta crisis del coronavirus.
"En algunos despachos, el 90% de los clientes ya ha manifestado su intención de hacer ERTE. Nos encontramos ante una gran casuística pero con un final común: la necesidad de reducir costes ante la falta de ingresos o actividad", explica el consejo general.
Asimismo, indica que muchos negocios que pueden abrir, como es el caso de las ópticas, talleres o profesionales de la salud como podólogos o fisioterapeutas, han transmitido su temor de no poder optar a las ayudas que ya ha puesto en marcha el Gobierno, precisamente porque no están obligados a echar el cierre.
No obstante, algunos de estos establecimientos deciden no abrir por voluntad propia, ya que están preocupados por el contagio, así como por la pérdida de clientes debido al confinamiento, en el caso de algunos talleres de reparación.
"A día de hoy, los gestores administrativos tienen mucha carga de trabajo, porque además de tramitar procedimientos urgentes, tienen que procesar la normativa que cambia día a día, además de asesorar y tranquilizar a sus clientes, que están atemorizados por las consecuencias económicas de esta crisis", explican los gestores administrativos.
PLAN DE APOYO COLEGIAL
El Consejo General de los Colegios de Gestores Administrativas y otros colegios ya está ultimando un plan de choque para paliar las consecuencias económicas y ayudar a los gestores administrativos en esta crisis.
En este sentido, anunció la pasada semana la exoneración de la cuota colegial de abril y la posibilidad de retrasar las cuotas de mayo y junio durante 30 días, una acción a la que se han adherido ya la mayor parte de los colegios.
Este organismo también ha reiterado su petición de que el Gobierno retrase el calendario fiscal y laboral durante, al menos, 30 días respecto al actual, por la situación generada por el estado de alarma decretado en el país.
