BILBAO, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Autoridad Portuaria de Bilbao se ha convertido en la primera empresa en poner en práctica entre sus empleados el programa Paziente Bizia-Paciente Activo del Departamento de Salud del Gobierno vasco.
El objetivo principal del programa -que no pretende sustituir el papel del profesional sanitario, pero sí complementarlo- es capacitar a personas con enfermedades crónicas y a sus cuidadores en el conocimiento de su enfermedad, así como en aquellos hábitos o conductas que les hagan conseguir un mejor estado de salud.
Los detalles de este programa han sido explicados en rueda de prensa por el viceconsejero de Salud del Gobierno vasco, Iñaki Berraondo, y el presidente de la Autoridad Portuaria, Asier Atutxa, quien, por otra parte, en su comparecencia se ha referido al conflicto de los estibadores y ha precisado que la situación en el Puerto, en cuanto a productividad, es "normal", pese a que los estibadores han optado por no doblar turnos.
En relación al pograma Paciente Activo, han precisado que se trata de un programa de educación en autocuidados basado en la metodología de la Universidad de Stanford que, desde el año 2014, Osakidetza ha desarrollado para crear una metodología propia "más ajustada a las necesidades del entorno" y así se han creado talleres que están dirigidos por personas que o bien tienen una enfermedad crónica o bien son cuidadores de una persona que la padece.
"Todos los grupos son conducidos por dos monitores, siendo uno, una persona con enfermedad crónica y el otro un profesional sanitario, que no se presenta como tal, sino como monitor para no romper la igualdad con el resto del grupo", han explicado.
En el taller llevado a cabo por la Autoridad Portuaria, han participado empleados en activo -próximamente habrá talleres específicos para trabajadores jubilados, que se han formado en temas como alimentación, consejos para una dieta saludable; ejercicio; comunicación; manejo de emociones y estrés; documento de voluntades anticipadas o la importancia de un descanso adecuado.
En 2014, la Autoridad Portuaria -que en la actualidad cuenta con 270 empleados- se adhirió a la Declaración de Luxemburgo, por la que se comprometía a integrar los principios básicos de la promoción de la salud en el trabajo, en la gestión de la salud de sus empleados, además del cumplimiento de sus obligaciones en materia de prevención de riesgos.
