Economía no responde a la petición de tarifa mínima y dice que es de "enorme dificultad" que las CC.AA. eliminen el 'céntimo sanitario'
MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Federación Nacional de Asociaciones de Transportistas de España (Fenadismer) mantiene el paro convocado en el sector a partir del próximo día 8 tras concluir "sin avances" las primeras reuniones de las previstas para toda esta semana con representantes del Gobierno.
Los transportistas, a través del Comité Nacional del Transportes (CNT), órgano de representación e interlocución del sector con la Administración, mantuvieron sendos encuentros con representantes del Ministerio de Economía y Hacienda y de la Dirección General de Tráfico.
Por parte del Departamento que dirige Pedro Solbes, el director general de Tributos y el director general de Política Económica, José Manuel de Bunes y Angel Torres, respectivamente, se comprometieron a estudiar fórmulas para facilitar ayudas específicas de I+D+i para la internacionalización al sector.
Por contra, trasladaron la "enorme dificultad" del Gobierno para atender a la petición de suprimir el denominado 'céntimo sanitario', el impuesto con que algunas comunidades gravan a los carburantes para contribuir a financiar la sanidad, dado que se trata de una competencia autonómica.
En este sentido, los representantes de Economía y Hacienda manifestaron además que el Gobierno contestará en la primera quincena de julio a la Comisión Europea respecto al dictamen elaborado por este organismo en el que recomendaba al Gobierno español eliminar el referido 'céntimo sanitario'.
Además, los miembros de Economía no dieron respuesta alguna a la petición básica de Fenadismer, y a la que esta patronal ha condicionado la desconvocatoria del paro, la de establecer una tarifa mínima legal para los servicios de transporte.
RESTRICCIONES DE TRAFICO.
En cuanto a la reunión con la Dirección General de Tráfico (DGT), los representantes de esta división del Ministerio del Interior apuntaron que es muy difícil que se supriman las restricciones a la circulación de camiones, dado que "responden a la necesidad de garantizar la fluidez del tráfico". No obstante, se comprometieron a crear un grupo de trabajo con las organizaciones.
Los transportistas continuarán mañana con la ronda de reuniones previstas para esta semana con un encuentro con representantes del Ministerio de Trabajo.
Las empresas del sector aseguran atravesar una crisis por no poder trasladar a sus precios el encarecimiento del combustible registrado en el último año, ante la negativa de sus clientes a aceptar las nuevas tarifas.
Según datos de esta patronal, el carburante ya supone el 40% del coste de explotación de un camionero, frente a la tasa del 30% que representaba el pasado año. Traducido a euros, y tomando como referencia el precio del gasóleo en mayo, la factura anual de combustible de un camión tipo asciende a unos 60.000 euros, un 36,8% (unos 16.170 euros) más en relación con el mismo mes de 2007.
