ÁVILA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -
La embajadora de Haití en España, Yolette Azor-Charles, aseguró hoy que "todavía hay un 1.200.000 personas que necesitan techo" en su país y que el pueblo haitiano "tiene una necesidad enorme de que le ayuden" porque "la gente ha sufrido un choque importante" y son muchos "los que lo han perdido todo".
Azor-Charles aseguró que más de un millón de personas está "en la calle" y explicó que "hay que entender que el pueblo quiere que le ayuden, que tiene una necesidad enorme", pero al mismo tiempo incidió en que atender a un millón de personas al día es "muy complicado".
En una conferencia ofrecida a los alumnos de la Universidad Católica de Ávila, explicó que en el caso de la falta de hogares, llegan tiendas de campaña al país pero "la temporada de lluvias, que empieza en mayo, ha llegado con mucha fuerza", ya que "durante seis de los siete días de una semana" se produjeron fuertes precipitaciones y la gente no puede dormir en el suelo sobre el agua, mientras que "incluso los que viven en casas que no están destrozadas tienen miedo a que se produzcan réplicas".
En este contexto, indicó que "no hay ningún supermercado que venda tiendas de campaña" y sí que existen promesas de que lleguen casas prefabricadas para quienes carecen de hogar.
AYUDA CONTINUA
Azor-Charles explicó que si bien la ayuda humanitaria ha disminuido tras la registrada después del terremoto, consistente en agua -"con la que se han evitado epidemias"-, comida y medicamentos, "luego ha seguido de manera firme" y a ella se ha unido "otro tipo de ayuda".
Además, aseguró que hay mucha gente sin trabajo dispuesta a ponerse manos a la obra, "pero hay que pagarles y si no se limpian los sitios recuperables, la gente no va a tener funcionalidad" y calculó que son necesarios "más de 1.000 días" para limpiar.
Bajo el título 'Haití: un llanto en la noche', la embajadora de este país en España habló de los problemas añadidos que sufre su país tras el terremoto, junto al capellán de la Universidad, Arturo Díaz, y el cooperante Alejandro Ruiz Mateos, que durante 15 días estuvieron cooperando en la zona de la catástrofe con la orden religiosa de las Hijas de la Caridad, en Puerto Príncipe.
Díaz explicó que el país "prácticamente carece de luz eléctrica", sufre serias deficiencias en el sistema sanitario y educativo y "no hay agua corriente en las casas", por lo que ha llamado a los jóvenes a que "acudan allí a ayudar, no se conformen con dar dinero y comida".
