La presidenta de la Asociación Mujer, Familia y Trabajo, Gloria Juste, defiende en esta entrevista concedida a Europa Press la importancia de que las empresas desarrollen un modelo productivo más humano. "La clave del siglo XXI consiste en que haya mucha más humanidad, conciliación e igualdad", asevera.
.- ¿Cuáles son los principales objetivos de la Fundación Mujer, Familia y Trabajo?
La principal misión de la fundación pasa por sembrar más humanidad en la sociedad buscando la igualdad de oportunidades, la conciliación y el equilibrio, valores por los que merece la pena luchar. Creemos que esta es la fórmula para tener una sociedad más humana por lo que hay que incidir en todos los agentes posibles. Así, si las empresas cambian sus políticas, van a darse cuenta de que no tienen trabajadores sino personas. La Administración pública también tiene que invertir más en las personas y las familias tienen que comprender que cada uno de sus miembros son importantes.
.- ¿En qué situación nos encontramos actualmente en materia de conciliación?
En España hemos evolucionado mucho aunque no tan rápido como esperábamos, pues empezamos a movernos más tarde. La pena es que no hayamos sido capaces de reflexionar sobre los modelos europeos que han tenido éxito y los que no. Desde hace nueve años, el cambio ha sido muy grande pero no al ritmo que podíamos haber aprovechado de la experiencia de otros.
Por ejemplo, es verdad que en España estamos muy bien en igualdad de derecho y contamos con una Ley de Conciliación desde el año 1999. Sin embargo, no estamos incidiendo en el cambio de cultura y mentalidad que es donde hay que influir más.
.- ¿Qué beneficios aporta la conciliación?
En uno de los congresos anuales que organizamos dijimos que la conciliación era rentable en el sentido más amplio de la palabra. Es rentable para la propia persona porque le permite vivir con más equilibrio en medio de la angustia, estrés y ansiedad que caracterizan el siglo XXI. Conciliar también es rentable para la familia: están desestructuradas porque no hay capacidad económica ni tiempo, y se provocan daños colaterales importantes como niños solos o mayores abandonados.
Y conciliar también es rentable para la empresa: si la persona está bien, si es tratada como persona humana, será más productiva y rentable, habrá menos rotación, menos absentismo, se generará talento, con más motivación, confianza mutua, compromiso y responsabilidad. Y estas cosas se demuestran con números.
.- ¿Están las empresas y las administraciones más concienciadas en este sentido o aún queda camino por recorrer?
Por fortuna, hay más concienciación. En el caso de las empresas, desde la fundación contamos con el 'Programa Más Humano', que ha tenido una gran respuesta. En primer lugar, porque hay leyes que les obligan, como planes de conciliación o la Ley de Igualdad, pero lo más importante es que las empresas han entendido que hay que cambiar las formas de trabajar rígidas e inflexibles que tenemos en España. Las compañías que diseñan políticas diferentes obtienen mejores resultados. No hay que olvidar que estamos a la cola de Europa en productividad y rentabilidad. Somos el país que trabaja un 10-15 por ciento más de horas que la media europea con escasos resultados.
.- Para aumentar esta concienciación se han puesto en marcha los Premios Concilia, que acaban de celebrar su VI Edición. ¿Qué supone para una entidad ser premiada con este galardón? ¿Qué destacaría de los premiados de este año?
Los tres grupos ganadores de este año han sido 'Grupo Toledo Imperial' de la Universidad Rey Juan Carlos, formado por María Sánchez Muñoz y Enrique Peinado Herrera; 'Concilia JAM', la Retoucherie de Manuela, de Andrea González; y 'Refréscate y Concilia', de Jennifer González Díaz y Cristiana González Tamayo.
Además de la dotación económica y de las prácticas remuneradas en las empresas de la Red Concilia, estos galardones aportan un valor añadido para estar preparado de cara al futuro. Asimismo, percibimos que los jóvenes de hoy en día son conscientes de los problemas de su tiempo y de que hay que cambiar. Los jóvenes de ahora son hijos de madres y padres trabajadores, y saben de lo que están hablando.
También nos ha llamado la atención el número de empresas que se han atrevido a presentarse a pesar de la crisis, que buscan medidas que no suponen un coste e implican flexibilidad y, de paso, obtienen resultados positivos.
.- ¿Qué proyectos va a llevar a cabo la fundación de cara al futuro?
En líneas generales, queremos seguir sembrando conciencia y profundizar en estos temas a través de congresos y seminarios, pero también insistir en programas asistenciales como el acompañamiento en la búsqueda de empleo a mujeres en situación de desventaja o con responsabilidades familiares. Hay que promover que haya más oportunidades de inserción laboral a quienes claramente se lo merecen, y desarrollar un modelo más humano para las empresas. La clave del siglo XXI consiste en que haya mucha más humanidad, conciliación e igualdad, siempre buscando la rentabilidad de la empresas.
