VALENCIA, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Consell Valencià de Cultura (CVC), Santiago Grisolía, entregó hoy la Medalla de Plata de la institución a la Fundación Esther Koplowitz, por la labor humanitaria y científica que desarrolla esta entidad con la residencia de acogida de Valencia La Nostra Casa, informó hoy el órgano consultivo.
El galardón fue entregado al vicepresidente de la Fundación, Andrés del Río, en representación de Esther Koplowitz y en presencia de sus hijas. Esther Koplowitz, que no pudo asistir al acto, manifestó su profundo agradecimiento y afecto al "maestro Grisolía" por su magnífica labor al frente al Consell y su dilatada carrera científica.
Tras repasar la relación de actividades de la Fundación, dedicada especialmente a la ayuda de los más necesitados, Santiago Grisolía señaló la "gran aportación de mecenazgo de la entidad", y añadió que la concesión de la medalla del Consell Valencià de Cultura a la Fundación "tiene un doble valor, como es el de reconocer y agradecer los grandes méritos de la fundación y de sus responsables, y por otra parte el de tener un carácter de ejemplo para todos, empezando por los empresarios y también, desde luego, por los responsables políticos".
Al acto asistieron diversas autoridades y personalidades de la vida cultural, económica, científica e institucional valenciana, entre ellas, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la presidenta del Palau de la Música de Valencia, Mayren Beneyto y el síndic de Greuges, José Cholbi. También acudieron el presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, Marcelino Oreja, el presidente de FCC, Baldomero Falcones, y el presidente de la Fundación FCC, Rafael Montes.
La Fundación Esther Koplowitz financió la construcción y el equipamiento de La Nostra Casa-Vall de la Ballestera, entregada en 2004 al Ayuntamiento de Valencia para su gestión. La residencia dispone de los más modernos tratamientos y terapias para la atención a personas mayores de edad con discapacidades físicas o intelectuales profundas. Su capacidad es de 60 plazas para internos y 40 en el centro de día.
La demanda de plazas para este tipo de personas ha llevado a la Fundación a lanzar el proyecto de una segunda residencia, que duplicará el número de beneficiarios.
Esther Koplowitz mantiene una gran vinculación con Valencia. En noviembre de 2004 fue distinguida como hija adoptiva de la ciudad. También colabora con otras instituciones como la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados y la Fundación Premios Rey Jaime I, concluyeron desde el CVC.
