Actualizado 09/02/2010 16:37

La Audiencia de Pontevedra estudiará un recurso sobre la libertad provisional del guardia civil acusado de matar a su ex


PONTEVEDRA, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra prevé deliberar "los primeros días de la próxima semana" sobre la libertad provisional del guardia civil Jaime M.S., acusado de matar a tiros a su ex pareja, Mari Luz Posse, en diciembre de 2007.

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) confirmó hoy que la Fiscalía presentó un recurso de súplica ante la Sala, con la finalidad de revocar la libertad provisional del acusado, argumentando que existe un "grave" riesgo de fuga.

En la misma línea, y acentuando también la "alarma social" que suscitó la puesta en libertad del guardia civil, en las próximas horas llegará a la Audiencia pontevedresa el recurso de la acusación particular.

El plazo para la presentación de los recursos finalizará el viernes y, al inicio de la próxima semana, los magistrados de la Sección Cuarta estudiarán el caso en privado.

DECISIÓN A PUERTA CERRADA

"Deliberaciones de este tipo, sobre recursos que cuestionan decisiones judiciales, no se hacen en audiencia, pública sino en privado a puerta cerrada", apuntaron fuentes vinculadas a la judicatura.

Las mismas fuentes apuntaron que son pesimistas respecto a la posibilidad de que se puede variar la libertad provisional del guardia civil, decretada por la Sala Cuarta de la Audiencia después de que la jueza instructora del caso prorrogase la prisión provisional supuestamente fuera de plazo --al pasar un día de los dos años--.

Para la jueza el tiempo de prisión empezó a contar desde el momento en que Jaime M.S. ingresó en prisión, cuando a efectos legales consta que el agente está privado de libertad desde el mismo momento en que fue detenido.

El acusado tiene que comparecer diariamente en un juzgado en Ferrol, ciudad donde reside su familia, hasta la celebración del juicio y no puede entrar en el término municipal de Cambados (Pontevedra), ni acercarse a los familiares de la víctima.