MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
El director adjunto de la agencia europea de protección de fronteras Frontex, Gil Arias, ha cuestionado que el endurecimiento de las políticas de control de la inmigración por parte de los estados suponga una solución a las oleadas de inmigrantes que están llegando a Europa.
"Políticas más duras no son la panacéa", ha explicado Gil Arias en una entrevista en RNE recogida por Europa Press. Ha recordado, en este sentido, que Italia aplicó hace años medidas similares a las que ahora se tratan de implantar en el Reino Unido y "no se produjo una reducción de los tráficos hacia ese país".
El director del Frontex ha incidido en la situación de Grecia que ha definido como "caótica" como consecuencia de la grave crisis económica que atraviesa. "El número de personas que han llegado a las islas este año son 130.000 y la capacidad de acogida de las autoridades griegas están desbordadas", ha indicado Gil Arias quien ha reconocido que muchos de los inmigrantes han podido llegar a las islas griegas atraídos, precisamente, por la situación que atraviesa el país.
"La falta de capacidad de las autoridades griegas para gestionar la situación y cierta publicidad engañosa respecto a que los centros de inmigrantes se cerraban puede haber producido cierto efecto llamada y cuando los inmigrantes llegan reciben un 'papelito' para presentarse en Atenas y posteriormente circulan a su libre albedrío", ha comentado Gil Arias.
En cuanto a la llegada de ciudadanos sirios a través de Ceuta y Melilla, el director del Frontex ha relacionado este incremento con la "violencia y brutalidad" de los traficantes en Libia que hace que los refugiados cambien las rutas. "Los flujos varían a través del tiempo. Lo que ahora es una constante puede variar", ha expuesto.
En cuanto a los recursos destinados al Frontex, Gil Arias ha lamentado la falta de asignación de medios por parte de los estados a la agencia de protección de fronteras. "Vivimos una situación de que tenemos mucho dinero pero no tenemos ni barcos, ni aviones, al final lo devolveremos (el dinero) a Bruselas sin haberlo utilizado", ha concluido.
