Actualizado 22/07/2008 21:31

El maltrato de menores a adultos aumenta en un 50 por ciento durante los últimos tres años, según la Policía

SAN LORENZO DE EL ESCORIAL, 22 Jul. (EUROPA PRESS) -

El inspector jefe del Grupo de Menores de la Policía (GRUME), Andrés Fernández Salagre, advirtió hoy que el número de maltratos producidos por parte de menores a adultos ha aumentado un 50 por ciento en los últimos tres años.

"Hay que destacar en los últimos dos o tres años un incremento del maltrato del menor al mayor hasta el punto de un aumento del 50 por ciento del año 2005 con relación a 2006, y de otro 50 por ciento de 2006 a 2007", explicó Fernández durante su intervención en el seminario 'Maltrato infantil: la actuación de las Fuerzas y los Cuerpos de Seguridad del Estado: GRUME y EMUME' de los Cursos de Verano de la Universidad Complutense.

En concreto, puso como ejemplo a la Comunidad de Madrid, donde el fenómeno "en aumento" del maltrato de menores a adultos ha obligado al Gobierno madrileño a combatir este "problema" mediante la intervención de personal especializado con "maltratadores menores".

En cualquier caso, el inspector centró su intervención en el maltrato infantil y enumeró sus principales causas, destacando la "falta de atención" de los progenitores, quienes, en "bastantes ocasiones, pasan muchas horas fuera de casa". Asimismo, reprobó que cada vez más los padres "descargan" aspectos relacionados con la educación de sus hijos en otras entidades.

Según agregó, el fenómeno de la inmigración ha incidido "probablemente" en el número de casos de maltrato. "Son personas que vienen de culturas diferentes y que no se cortan lo más mínimo en las reacciones agresivas y violentas con los chavales", señaló, para hacer un llamamiento a que todos los colectivos "respeten de alguna manera" los principios de la sociedad española.

PROTOCOLO DE ACTUACIÓN POLICIAL

Acto seguido, explicó el protocolo de actuación que siguen los cuerpos policiales al tener conocimiento de un caso de maltrato. Con el fin de dar la respuesta adecuada, subrayó, el menor no podrá ser obligado a declarar, y en el caso de hacerlo, estará presente uno de sus progenitores o tutores. Asimismo, indicó que los agentes tendrán especial cuidado para evitar, en la medida de lo posible, la confrontación visual del niño con su agresor.

En el caso de que la agresión haya tenido lugar en el entorno familiar, las unidades se dispondrán a "sacar al niño cuanto antes de su domicilio" y ejecutar, "si procede", a la detención del agresor. Además, avisó de que "un problema" que tiene lugar con frecuencia respecto con las parejas separadas es la "manipulación de los niños para, haciendo una denuncia falsa, tratar de modificar el régimen de visitas".

Por otra parte, intervino en este foro la jefa del Equipo de Mujer y Menor de la Guardia Civil (EMUME), Regina Mico Díaz, quien resaltó el tratamiento jurídico desde el que trabaja este grupo especializado en el tratamiento de la violencia en el entorno familiar. "No dejamos de ser simples policías", apostilló.

Advirtió también de la falta de conciencia de la sociedad ante la sospecha de un posible maltrato a un niño o adolescente. "La visión social me asusta personalmente", reconoció, para avisar de que "la gente de a pie no da la magnitud que tiene" a estos sucesos.

Dicho esto, hizo hincapié en la actuación del EMUME ante un caso de maltrato infantil. En primer lugar, un centro médico, un colegio, un particular, aunque sea de forma anónima, o los mismos agentes policiales ponen en conocimiento un posible caso de agresión a un menor; después este equipo lleva a cabo la investigación pertinente, para finalmente, tomar las medidas de protección adecuadas.