Actualizado 06/03/2013 09:30

UNICEF dice que alrededor del 20% de las escuelas de Siria han sido destruidas o dañadas durante el conflicto

MADRID, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha afirmado este martes que alrededor del 20 por ciento de las escuelas de Siria han sido destruidas o han resultado dañadas en el marco del conflicto armado que atraviesa el país.

En este sentido, ha destacado que hay zonas del país en las que hasta la mitad de los centros escolares sido afectados por los combates, al tiempo que ha apuntado que muchos niños han perdido casi dos años de escolarización en las áreas más afectadas.

"El sistema educativo en Siria se está tambaleando a causa del impacto de la violencia", ha dicho el representante de UNICEF para el país árabe, Yusuf Abdel Jelil, en declaraciones concedidas al diario británico 'The Guardian'.

En base a los datos del organismo, al menos 2.400 escuelas han sido destruidas o han resultado dañadas, entre ellas 772 de la provincia de Idleb, 300 de la provincia de Alepo y otras 300 en la provincia de Deraa.

Asimismo, UNICEF ha anunciado que carece de fondos para hacer frente a la situación y ha resaltado que necesita 20 millones de dólares (alrededor de 15,3 millones de euros) para sus programas educativos de cara al primer semestre del año. Sin embargo, ha dicho que únicamente ha recibido tres millones de dólares (unos 2,3 millones de euros) para este fin.

El portavoz de la dirección general regional de UNICEF, Simon Ingram, ha puntualizado que cientos de miles de niños sirios no han podido recibir escolarización a causa de los combates y ha recalcado que el organismo "espera que los donantes den un paso al frente lo antes posible para rellenar este agujera alarmante en la financiación".

Por ello, ha señalado que se están celebrando reuniones "urgentes" con los gobiernos de los países del Golfo Pérsico, que se comprometieron en enero a entregar la gran mayoría del total de 1.500 millones de dólares (alrededor de 1.150 millones de euros) en ayuda humanitaria al país.

"Ha habido debates sobre la extensión de la efectividad de la ayuda. Es correcto que los donantes no quieren hacer la mejor inversión posible para el pueblo sirio, pero deben saber que, desde nuestro puntos de vista, la ONU está mejor colocada para distribuirla de la forma más efectiva y en la mayor cantidad de zonas del país posible", ha dicho Ingram.

En este sentido, ha subrayado que UNICEF pretende aumentar las operaciones "a través de las líneas" para llegar a las zonas controladas por los rebeldes a través de negociaciones "con las diferentes partes". "A menos que consigamos la financiación será difícil incrementar estas intervenciones en la medida en la que son necesarias", ha añadido.

SENTIMIENTO DE DECEPCIÓN

Asimismo, Ingram ha dicho que "hay un sentimiento general de decepción en la comunidad humanitaria". "Los compromisos fueron fantásticos y fueron ampliamente aplaudidos en su momento, pero la prueba es que la actual entrega de asistencia muestra vacíos en nuestra respuesta sobre el terreno".

"Simplemente no podemos aumentar la respuesta en concordancia con las necesidades (de la gente), que están creciendo a cada momento. Estamos muy decepcionados, pero esperamos que los donantes den un paso adelante", ha añadido.

"Creemos que el sector educativo, debido a su importancia para mantener los desarrollos sociales en Siria, es una de las áreas prioritarias a las que los donantes han de entregar la financiación en el menor plazo de tiempo posible", ha remachado Ingram.

Naciones Unidas calcula que desde marzo de 2011, cuando comenzó el levantamiento popular contra el Gobierno de Bashar al Assad, unas 70.000 personas han muerto a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y rebeldes en Siria.

El Gobierno atribuye gran parte de las víctimas a los grupos terroristas que actúan en el país árabe --según ha denunciado insistentemente-- con la financiación y el apoyo material de Arabia Saudí, Qatar y Turquía, entre otros.