Actualizado 30/01/2013 18:51

Amigos de la Tierra celebra el fallo del Tribunal de La Haya contra Shell porque es un triunfo para el medio ambiente


MADRID, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -

Amigos de la Tierra ha celebrado el fallo de un tribunal de los Países Bajos contra la petrolera Shell, a la que ha declarado culpable de contaminar el delta del Níger, porque se trata de un triunfo para el medio ambiente y para los agricultores nigerianos.

La petrolera había sido demandada por Amigos de la Tierra Holanda y cuatro agricultores en 2008. En el juicio, que se ha celebrado este miércoles en La Haya, el tribunal ha declarado culpable a Shell de uno de los derrames ocasionados por la multinacional en la comunidad de Ikot Ada Udo en el Delta del Níger.

"Es una victoria sin precedentes", señala Amigos de la Tierra en un comunicado, en el que destaca que esta es la primera vez que una multinacional es juzgada por los crímenes medioambientales causados por sus actividades en el extranjero.

Para la ONG, gracias a esta sentencia se abren las puertas a nuevos juicios, que podrían permitir depurar responsabilidades de las grandes empresas por los graves impactos ocasionados en otros países y poner fin así a la impunidad de las mismas.

SE PODRÍA HABER EVITADO

En la sentencia, la multinacional petrolera se verá obligada a limpiar el derrame y a compensar económicamente a la comunidad de Ikot Ada Udo, del Delta del Níger. Los demandantes piden a su vez un mantenimiento adecuado de los oleoductos de Shell ya que la insuficiencia en su gestión ha sido la principal causa de los vertidos. El tribunal ha considerado que la empresa debía haber evitado el derrame.

La denuncia de Amigos de la Tierra Holanda y los cuatro agricultores se inició en 2008 y hasta hoy, casi cinco años después no se ha podido juzgar a la multinacional por el desastre. La ONG subraya que se ha enfrentado a "multitud de obstáculos legales" presentados por Shel antes de llegar este día y, anteriormente, en Nigeria, ya se habían denunciado los vertidos de la empresa ante la justicia de ese país sin que se consiguiera una sentencia que responsabilizase a la empresa.

Pese a que la consideran una "buena noticia", Shell también era juzgada por otros dos derrames en el Delta del Níger, en las comunidades de Goi y Oruma. En estos casos, el Tribunal no ha

encontrado suficientes razones para culpar a Shell, alegando que no se

podía demostrar la relación directa entre la empresa matriz en

Holanda y el comportamiento de su filial en Nigeria. En realidad, el

acceso a estas pruebas fue denegado a Amigos de la Tierra Holanda,

aunque Shell en los Países Bajos es propietaria del 100% de las

acciones de su filial nigeriana. El juicio se ha centrado en "tan solo tres vertidos de petróleo de los miles que ha provocado Shell en Nigeria".

Asimismo, Amigos de la Tierra Holanda, junto a los cuatro agricultores nigerianos ha anunciado que apelará la decisión de los casos en Goi y Oruma.

La directora de Amigos de la Tierra, Liliane Spendeler, ha manifestado que "muchas empresas europeas están involucradas en situaciones similares a la de Shell y están causando daños al medio ambiente fuera de nuestro continente".

"Encontramos una gran laguna en la legislación europea, que permite a las empresas matrices como Royal Dutch Shell embolsarse los beneficios de una filial en el extranjero, sin ninguna responsabilidad sobre los daños causados en otros países", ha añadido.

La principal causa de los vertidos en Nigeria por parte de Sherll ha sido el mantenimiento "insuficiente" de los oleoductos. Decenas de millones de barriles de petróleo se han derramado allí desde 1950. Amigos de la Tierra denuncia además que el desastre en el Delta del Níger está siendo silenciado, con consecuencias desastrosas para la gente y el medio ambiente.

Finalmente, Amigos de la Tierra Europa insta a la Comisión Europea

a que adopte medidas que garanticen la asunción de responsabilidades

por parte de las empresas matrices. Éstas han de ser consideradas

responsables automáticamente por las acciones de sus filiales en el

extranjero. El próximo 6 de febrero la Comisión Europea discutirá los pasos que puede tomar para limitar la violación de los Derechos Humanos y ambientales por parte de las empresas.