Actualizado 21/10/2010 14:19

Ecologistas piden a la ONU apoyar la moratoria en proyectos de geo-ingeniería


NAGOYA (JAPÓN), 21 Oct. (Reuters/EP) -

Naciones Unidas debería poner una moratoria a todos los proyectos de geo-ingeniería, como volcanes artificiales y el plan de sembrar nubes, según declararon este jueves los grupos ecologistas que han acudido a la reunión de la ONU en Japón cuyo objetivo es combatir la pérdida de especies vegetales y animales.

Los riesgos podrían ser muy grandes ya que no se conoce del todo el impacto de manipular la naturaleza a gran escala, temiendo que puedan dañar la naturaleza y a la humanidad, según han explicado dicos grupos.

Enviados de cerca de 200 países se han reunido en Nagoya para concretar los objetivos para luchar contra la destrucción de bosques, ríos y las barreras de coral que aportan recursos y servicios a las economías y a las diferentes formas de vida.

Una de las principales causas de la pérdida de biodiversidad es el cambio climático, según Naciones Unidas, obligando al mundo a frenar el calentamiento global y prevenir sequías extremas, inundaciones y el aumento del nivel del mar.

Algunos países ven los proyectos de geo-inginiería, que cuestan miles de millones de euros, como una forma de controlar el cambio climático reduciendo la cantidad de sol que llega a la tierra o absorbiendo el exceso de emisiones de gases de efecto invernadero, especialmente las de dióxido de carbono.

"Está completamente fuera de lugar tomar una decisión para un grupo de países industrializados para que prueben la geo-inginiería sin la aprobación de todo el mundo", dijo Pat Mooney, de la organización canadiense ETC Group.

"No deberían proceder con experimentos en la vida real, en el medioambiente o el desarrollo de la geo-ingeniería hasta que haya un consenso en las Naciones Unidas de que está bien", añadió.

Algunos grupos ecologistas dicen que la geo-ingenería sirve de excusa para algunas compañías y gobiernos de no dar pasos para el recorte de emisiones que calientan el planeta. Naciones Unidas pretende realizar una investigación sobre la cuestión que será parte del gran informe de 2013.

PROYECTOS

Algunas prácticas de la geo-ingeniería incluyen la fertilización de los océanos, que consiste en rociar hierro u otros nutrientes en grandes superficies para hacer crecer artificialmente el phitoplancton, que absorbe el dióxido de carbono. Esto puede diezmar a las algas, absorber los nutrientes, matando peces y otros animales.

Otra de las técnicas es esparcir agua de mar por la atmósfera para incrementar el reflejo y la condensación de nubes para que devuelvan más luz al espacio. Se ha hablado de colocar millones de pequeños reflectores solares en el espacio para reducir la cantidad de luz solar que llega a la tierra.

Los volcanes artificiales consisten en soltar en la estratosfera pequeñas partículas de sulfato y otros materiales que reflejen la luz, simulando el efecto de una erupción volcánica.

Otra técnica es la captura y el almacenaje del dióxido de carbono, que consiste en recoger el CO2 de las plantas de energía, refinerías y pozos de gas natural y colocarlo bajo tierra, medida que apoyan varios gobiernos.

Mooney cree que la Convención de Diversidad Biológica (CDB) de Naciones Unidas debería aumentar la moratoria de fertilización de océanos aceptada en 2008 a todos los aspectos de la geo.ingeniería, aunque algunos países se han resistido, como Canadá.

"Canadá sólo esta preocupada por la falta de claridad en las definiciones, qué está incluido dentro de geo-ingeniería", dijo la jefa de la delegación canadiense Cynthia Wright.

"Canadá muestra las preocupaciones de la comunidad internacional de los potenciales impactos negativos de la geo-ingeniería en la biodiversidad y quiere trabajar con otros países para evitar dichos impactos", añadió Wright.

Los ecologistas creen que la geo-ingeniería va contra el espíritu de las conversaciones de Nagoya, que pretende colocar nuevos objetivos para 2020 para proteger la naturaleza, como delimitar más zonas de tierras y mares protegidos, el recorte de la contaminación y la redirección de la pesca.

"Estamos a favor de más investigación (en geo-ingeniería), como en todos los campos, pero no su implantación actual por que es muy peligroso. No podemos saber los efectos", dijo Francois Simard, del grupo IUCN. "Mejorar la conservación de la naturaleza es lo que deberíamos hacer para luchar contra el cambio climático, no intentar cambiar la naturaleza", añadió.