Actualizado 11/05/2010 19:00

Greenpeace propone crear un fondo internacional para implantar energías renovables en los países en desarrollo

Iberdrola

WWF presenta una guía que analiza el agotamiento de los combustibles fósiles y su inseguridad a través de la isla ficticia Heliosthana


VALENCIA, 11 May. (EUROPA PRESS) -

Greenpeace propone la puesta en marcha de un nuevo mecanismo financiero para impulsar las energías renovables en los países en vías de desarrollo a través de un fondo internacional, que permitiría obtener la máxima energía limpia al mínimo coste.

La iniciativa plantea instalar entre 2010 y 2030 de 1.600 a 2.300 gigavatios (GW) de energías renovables en países no pertenecientes a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), lo que ahorraría entre 77.000 y 82.000 millones de toneladas de CO2 en ese periodo, según informó en un comunicado la organización ecologista, con motivo del comienzo de la Conferencia Solar en Valencia, en el marco de la Presidencia Española de la Unión Europea.

La organización ecologista explicó que este mecanismo tiene como principal objetivo facilitar la introducción en países en desarrollo de leyes sobre tarifas o primas de apoyo a las energías renovables, como las que ya se aplican en 40 naciones, ya que, según dijo, este sistema es "el más eficiente para el desarrollo de las energías limpias, puesto que logra más energía renovable al menor coste".

El mecanismo consistiría en la creación de un fondo internacional, que financiaría las tarifas o primas de apoyo a las renovables en los países en desarrollo. El fondo se nutriría de las aportaciones de los países desarrollados, mediante contribuciones recaudadas a través de la subasta de derechos de emisión de CO2 o mediante tasas sobre la energía sucia.

Con este sistema, se costearía la transición desde la situación actual, en que la energía renovable tiene un coste mayor que la producida con energías sucias (ya que éstas no pagan por sus impactos ambientales), hasta el momento en que el coste de la generación renovable sea inferior al de la energía sucia, lo cual sucederá alrededor de 2030.

Así, en vez de subvencionar proyectos individuales, la propuesta de Greenpeace "se basa en financiar la implantación de los sistemas de apoyo más eficientes, de forma que con menos dinero se obtenga un desarrollo mayor y más rápido de las renovables en países que actualmente tienen menos recursos económicos para salir del círculo vicioso de la energía sucia", reveló.

El responsable de la campaña Cambio Climático y Energía de Greenpeace, José Luis García, manifestó al respecto que "el dilema no es entre energías limpias y caras o sucias y baratas, sino entre seguir pagando una energía sucia e insostenible, que es cada vez más cara, o invertir en energías limpias que cada vez cuestan menos".

'[R]EVOLUCIÓN ENERGÉTICA'

La propuesta de Greenpeace forma parte del estudio '[R]evolución Energética', un documento que considera dos escenarios de desarrollo de las energías renovables que, gracias al mecanismo de financiación propuesto, permitirían la generación adicional de una cantidad de energía renovable en los países en desarrollo equivalente a entre 19 y 29 veces la electricidad total que genera España cada año. Con una media del precio de CO2 de 23 dólares por tonelada, el programa total costaría entre 76.300 y 61.400 millones de dólares anuales.

Greenpeace invitó al Gobierno español a tomar en consideración esta propuesta y trasladarla al Plan Solar Mediterráneo, de forma que dentro de dicho plan se haga la primera experiencia de puesta en práctica del mecanismo de financiación de tarifas o primas de apoyo a las renovables.

Por su parte, WWF y la fundación alemana Heinrich Böll presentaron una guía, con motivo de la Conferencia Solar, que muestra cómo alcanzar un futuro de energía limpia, basándose en un país mediterráneo ficticio, Heliosthana, que se sustenta en unos principios que se podrían aplicar de forma inmediata en muchos países mediterráneos, según la organización. Además, están construidos "a partir de soluciones realistas que abren el camino hacia un futuro de energía 100 por cien renovable".

El informe muestra la viabilidad de que la energía utilizada en un país sea totalmente renovable. Para ello, ha creado un estado ficticio al que ha denominado Heliosthana, cuyo significado proviene de Helios (personificación del Dios del Sol en la mitología griega) y Sthana (lugar en Sánscrito).

"SOLUCIONES INMEDIATAS Y TANGIBLES"

Este documento analiza el problema del agotamiento de los combustibles fósiles y su inseguridad en cuanto a suministro de energía, lo que hace que los precios sean inestables. Además, muestra lo imprescindible que es "encontrar soluciones inmediatas y tangibles, ya que los efectos del cambio climático y la pérdida de biodiversidad son evidentes".

El proyecto de Heliosthana ofrece una respuesta viable para este escenario energético, describiendo una década de transición armoniosa hacia un sistema más sostenible que respete al ser humano y al planeta, manteniendo simultáneamente un desarrollo equilibrado, tanto económico como social.