MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los humedales de agua dulce costeros son más vulnerables a la erosión durante los huracanes que los 'hábitats' con mayores niveles de salinidad, según un estudio llevado a cabo por investigadores estadounidenses realizados tras los huracanes Katrina y Rita del año 2005.
El estudio, publicado en 'PNAS', concluye que el terreno que tiene una vegetación más enraizada, en este caso los humedales salados, "pueden soportar de mejor manera la presión ejercida por las mareas y las olas durante un huracán".
De esta forma, la vegetación ejerce una "resistencia a la erosión" en función del tamaño de sus raíces. Así, los científicos identificaron una zona "débil" de aproximadamente 30 centímetros por debajo de la superficie en los humedales de agua dulce, mientras que en los pantanos con mayor cantidad de sal las raíces penetraban hasta un metro por debajo del suelo.
Por ello, los investigadores han asegurado que "durante ese periodo, las tormentas y ondas asociadas a estos huracanes erosionaron cerca de 527 kilómetros cuadrados de humedales de la planicie costera de Luisiana", erosionando de una forma "más acentuada" los humedales de baja salinidad que los humedales salados, que se mantuvieron firmes y no han cambiado en gran medida".
Por último, el equipo de investigadores ha apuntado que los resultados podrían desempeñar un papel "fundamental" a la hora de configurar los programas de restauración y los planes de ordenación de tierras en las regiones que son propensas a las tormentas tropicales.