Actualizado 26/08/2010 15:43

Incendio.- Piden prudencia a la hora de señalar posibles culpables en el incendio de la cala ibicenca

PALMA DE MALLORCA, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -

El delegado del Gobierno en Palma de Mallorca, Ramon Socías, ha pedido "prudencia" ante las "declaraciones que no ayudan a nada a la investigación" y que, a su juicio, "entorpecen", en relación al incendio registrado en la cala ibicenca de Benirrás que se inició el pasado domingo y fue controlado este miércoles.

Este martes, el consejero de Medio Ambiente y Movilidad de la comunidad balear, Gabriel Vicens, indicó que el fuego fue provocado por una negligencia en una cueva cercana a la zona en la que se encontraban los vehículos estacionados.

En este sentido, Socías ha remarcado que "poner una seña sobre unas personas en concreto" sobre las que no se tiene la certeza de que realmente hayan sido "perjudica a la investigación".

Así, ha indicado que todavía no se descarta que el fuego se originase tras la explosión de un coche, aunque ha reconocido que es la "hipótesis menos probable". Por ello, ha señalado que se debe "dejar trabajar a los investigadores" de manera que, cuando se llegue a alguna conclusión, "ésta será comunicada".

Según ha apuntado, en el incendio de Benirrás hay "una serie de indicios" pero todavía no son "suficientes para poder otorgar la autoría a nadie", a la vez que ha remarcado que tampoco se ha determinado si éste fue provocado o se debió a una negligencia; aunque "se trabaja más" en esta segunda posibilidad, ha admitido.

¿HAY MANO CRIMINAL?

Socías ha puntualizado en esta línea que los técnicos del SEPRONA son quienes determinarán si ha habido una mano criminal tras este incendio. Además, ha destacado que las negligencias "no quitan responsabilidad" en los sucesos y que serán los jueces quienes "determinarán en qué grado de responsabilidad" se ha incurrido. "Hay imprudencias que pueden llegar a ser consideradas como criminales", ha añadido.

En cuanto a la posibilidad de que se vayan a continuar llevando a cabo actos como fiestas en zonas como las que se vieron afectadas por el fuego, Socías ha señalado que es el alcalde del municipio el que debe "decidir lo que deja hacer y lo que no". En estos casos, "está el Ayuntamiento, luego el Consell, el Gobierno balear y, en último término, el Gobierno central".

"Las administraciones con responsabilidad deben llegar a una decisión" en los posibles casos de que se considere que la celebración de fiestas pueden ser perjudiciales para el entorno o que hay "demasiada presión urbana" sobre una cala o playa.

Por otra parte, en relación al incendio de Petra que se originó este lunes ha indicado que en este caso "parece más claro" que ha sido provocado, por lo que, ahora, se debe trabajar para determinar quién o quiénes fueron los autores.