Actualizado 07/06/2013 14:45

Estudiantes y jóvenes impiden durante 14 horas la salida de diputados y banqueros del Parlamento de Sarajevo


MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

Más de 1.500 diputados, funcionarios y banqueros de todo el mundo se han visto obligados a permanecer 14 horas en el interior del Parlamento bosnio contra su voluntad ante el asedio realizado por miles de estudiantes y jóvenes parejas para protestar por el fracaso de las negociaciones para modificar el registro oficial de ciudadanos, dada la complicada situación política en un país donde conviven con dificultad serbios, croatas y musulmanes.

La ausencia de este número para los recién nacidos ha provocado casos como el que detonó el incidente: un post en Facebook en el que los padres de un bebé de tres meses denunciaban su incapacidad para garantizar el traslado del niño a un hospital donde se le iba a practicar un trasplante.

La persistencia del asedio fue tal, que el enviado internacional de paz de Bosnia, Valentin Inzko, tuvo que intervenir para pedir a los manifestantes que abandonaran sus posiciones sobre las 4.00 de la madrugada de hoy, después de que algunos de los más de 250 banqueros de todo el mundo que asistían a la sesión avisaran a sus respectivas embajadas de que estaban sometidos a un "secuestro".

"Me han llamado diplomáticos de Austria y Alemania para pedirme que saque (a los banqueros) de ahí", declaró Inzko al término de la crisis, que a su entender "se reflejará en la imagen exterior del país" porque los financieros extranjeros "estaban visitando el Parlamento para preguntar por las posibilidades de inversión en el país".

Para el diputado de oposición Asim Sarajlic, sin embargo, este asedio "es una imagen verídica de la realidad de Bosnia, e ilustra la crisis política y la impotencia del sistema", según declaró a Reuters a su salida del Parlamento.

Sarajlic se refiere al fracaso de las conversaciones para determinar los 13 dígitos del número de identificación ciudadano según el distrito, en lo que se trata de uno de los ejemplos más descarados de los conflictos político-étnicos que todavía colean en el país desde la guerra que terminó en 1995.

En el momento de la salida de los diputados, solo quedaban en la calle unos 350 de los más de 3.000 ciudadanos que rodearon el Parlamento con una cadena humana para pedir a Inzko "garantías firmes" de que se aprobará una nueva ley que corregirá inmediatamente la ausencia de este marco legal, según informa la cadena serbia B92.