Actualizado 15/02/2010 19:02

El fuego calcinó en enero 58,2 hectáreas

EP


MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

La superficie arrasada por los incendios durante el mes de enero de 2010 no llega a las 60 hectáreas (58,21), frente a las más de 2.000 (2.041) que el fuego calcinó en el mismo mes de 2009, según datos del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM).

En este sentido, el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Ángel Rivera, apuntó que los sucesivos temporales de agua y nieve registrados durante el primer mes del año han dejado los suelos "saturados de agua", lo que ha contribuido "parcialmente" al descenso en un 97,1 por ciento del número de hectáreas quemadas.

Así, durante el primer mes del año se han registrado un total de 48 siniestros frente a los 142 registrados hace un año. De ellos, 34 han sido conatos (menos de una hectárea) y otros 14 incendios (una hectárea o más). Además, no se produjo ningún gran incendio (más de 500 hectáreas).

Por tipo de superficie, el 30,73 por ciento de las 58,21 hectáreas quemadas eran de superficie matorral y bosque abierto; el 19,43 por ciento, superficie forestal y un 8,05 por ciento de lo quemado era superficie arbolada.

Por áreas, las comunidades interiores (no costeras salvo León y Zamora) registraron el 54,17 por ciento de los fuegos; el Mediterráneo auspició el 20,83 por ciento de los incendios; el noroeste tuvo el 18,75 por ciento y Canarias registró el 6,5 por ciento de las llamas.

Para Rivera, con los sucesivos frentes que han dejado agua y nieve en toda España la vegetación está "muy húmeda" por lo que es "más difícil que pueda arder". En declaraciones a Europa Press, incidió en que de cara al verano habrá más vegetación debido a las lluvias, por lo que advirtió de que se deberá tener en cuenta si la primavera es lluviosa o si las temperaturas son muy altas y se seca mucho la vegetación. "Una cosa es que haya combustible y otra cosa es la facilidad con que ese combustible pueda arder, hay que ver cómo viene la primavera", explicó.

Por su parte, el secretario general del Colegio de Ingenieros Técnicos Forestales, Raúl de la Calle, dijo a Europa Press que las intensas lluvias registradas este invierno no tendrán un impacto decisivo en la campaña de incendios de este año porque el periodo crítico, donde es relevante el volumen de lluvia, es la primavera, momento en el que, según este experto, deberían haber finalizado los tratamientos preventivos.

Finalmente, el decano del Colegio de Ingenieros de Monstes, José Carlos del Álamo, considera poco relevante, porque el periodo de tiempo es corto, el impacto de los temporales en la bajada de los incendios.