Actualizado 20/01/2010 12:54

Los muertos por la violencia en Nigeria suben a 200 y los testigos afirman que siguen los enfrentamientos


MADRID, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -

Al menos 200 personas han muerto ya en los enfrentamientos en la ciudad nigeriana de Jos, según afirmó este miércoles la organización pro Derechos Humanos Human Rights Watch (HRW), quien pidió al Gobierno del país que solicite a las fuerzas de seguridad que cumplan con los niveles internacionales del uso de la fuerza.

Además, los testigos entrevistados por esta organización indican que anoche aún podían escucharse tiroteos en la ciudad, y que se veía salir humo de los barrios más afectados.

Por otro lado, HRW ha pedido al Gobierno que investigue y juzgue a los responsables de la muerte de estas personas y haga frente a las causas que hay detrás de este nuevo brote violento en Jos, capital del estado de Plateau, en el centro del país. "Ya es suficiente, los líderes de Nigeria necesitan afrontar el ciclo de violencia alimentado por la impunidad", afirmó una investigadora de HRW, Corinne Dufka.

Los enfrentamientos entre cristianos y musulmanes comenzaron el domingo por la mañana. Según los líderes de la sociedad civil, los disturbios comenzaron con una discusión por la reconstrucción de una casa perteneciente a un musulmán que resultó destrozada en la violencia de noviembre de 2008.

El comisario de policía del estado de Plateau, Greg Anyating, explicó que el detonante fue el ataque que realizó un joven musulmán contra los cristianos en uno de los distritos de la ciudad, una acusación que los líderes musulmanes niegan.

De acuerdo con informes creíbles de los líderes de la sociedad civil, señala HRW, y de los medios de comunicación nacionales e internacionales, la violencia fue realizada por multitudes sectarias armadas con pistolas, arcos y flechas y machetes. Además, se han producido saqueos e incendios de casas y tiendas, junto con varias iglesias y mezquitas. También hay varias informaciones que indican que tanto el Ejército como la Policía emplearon un uso excesivo de la fuerza a la hora de responder a la violencia.

Los líderes musulmanes informaron de que 80 de los muertos fueron llevados a la mezquita central de Jos ayer por la tarde, a los que se unen los 71 ya enterrados en los dos primeros días de enfrentamientos. Un responsable cristiano indicó que el lunes murieron 50 cristianos y ayer otros 15.

Los tres días de enfrentamientos han dejado al menos 5.000 desplazados. Para evitar más choques, el Gobierno estatal desplegó efectivos adicionales y unidades de Policía antidisturbios y ayer impuso un toque de queda de 24 horas en la ciudad.

Por otro lado, las autoridades de los estados fronterizos con Plateau, Kaduna y Bauchi, han tomado medidas para impedir que la violencia se extienda hasta sus territorios, informa la agencia AllAfrica que indica que esta decisión sigue las experiencias pasadas en las que otros brotes de violencia se han extendido a los estados vecinos.

Según un comunicado, se ha ordenado a los agentes de seguridad "que hagan frente a cualquier persona sospechosa de causar problemas o de difundir rumores infundados que pretendan romper la paz en la zona". Además de intensificar las patrullas policiales en las fronteras entre estados para impedir el flujo de armas, se ha afirmado a los residentes que no deben temer ningún brote de violencia puesto que ya se han tomado todas las medidas necesarias.