Actualizado 05/02/2013 18:36

Religiosa en África: "España sufre una crisis pero no tiene nada que ver con lo de aquí"

Hermana Nuria Juvanteny en rueda de prensa de Manos Unidas
EUROPA PRESS


MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La hermana Nuria Juvanteny, de las Carmelitas de la Caridad o Vedrunas, que ha trabajado 17 años en Gabón (África), ha admitido que en España se está sufriendo una crisis pero ha advertido de que "no tiene nada que ver" con lo que ocurre en África.

Durante la presentación de la LIV Campaña de Manos Unidas, organización que colabora con sus proyectos, ha apuntado que "con tan solo un 10% de lo que se gasta en armas --entre cuyos productores, según ha precisado, también se encuentra España--, el hambre en el mundo y los problemas de los que son víctimas las mujeres se habrían terminado".

Además, ha denunciado que todavía hoy existe tráfico de niñas en Togo, donde, según explica, las mafias buscan a jóvenes de familias ignorantes y les ofrecen llevarse a sus hijas a otro país prometiéndoles bienestar, escuela y sueldo, para luego utilizarlas como esclavas domésticas.

Juvanteny ha indicado que estas mafias compran a las niñas por una pequeña cantidad de dinero y las introducen en unas barcas que las trasladan desde países como Togo, Benín o Chad a Gabón en unos viajes que pueden durar hasta tres meses y en los que las niñas solo tienen un bocadillo y una botella de agua.

Después de las penurias y de ver cómo lanzan al mar a las que mueren por el camino, en Gabón, según relata Juvanteny, las venden a mujeres con dinero y estas las mandan al mercado con un cesto cargado sobre la cabeza. "Tienen que llegar a casa con el dinero y si no, son castigadas duramente", ha subrayado, recordando el caso de una de las chicas que recogieron del mercado de Libreville y que tenía toda la espalda quemada con marcas de plancha. A estas chicas, las acogen en sus centros 'Arc-en-ciel' y 'Espoir'.

Asimismo, Juvanteny ha denunciado la situación que viven los habitantes del Congo, principalmente en el este del país, y ha recordado a los ciudadanos del "primer mundo" que allí más de 600.000 mujeres mueren prácticamente cada semana y que todos los aparatos electrónicos que se utilizan aquí vienen de las minas de las que se extrae el coltán, en las que trabajan y mueren niños de 4 ó 5 años.

MÁS DE 300 FEMINICIDIOS EN EL SALVADOR

Por su parte, la directora ejecutiva del Movimiento Salvadoreño de Mujeres (MSM), Isabel López Guevara, ha destacado, entre los problemas del país, los feminicidios, que en 2012 alcanzaron los 329, una cifra "alarmante" pues la mayor parte de las mujeres asesinadas eran niñas menores de 18 años o jóvenes. Así, ha explicado que, aunque la cifra se ha reducido en un 50% con respecto a 2011 (628 feminicidios), están convencidas de que muchas de las mujeres que permanecen desaparecidas desde 2012 también han sido asesinadas.

Estos casos están vinculados, según ha explicado, a la situación de violencia que vive El Salvador con el crimen organizado, el narcotráfico, las pandillas o la corrupción, una violencia estructural que viene, según ha remarcado, de la alta concentración de las riquezas y su injusta distribución sumado a una "debilidad estructural del Estado y a una cultura política autoritaria". Además, ha recordado que hasta hace once años vivían en su país un conflicto armado.

Otros problemas, según ha apuntado, son el analfabetismo que ronda el 12,8% del total de la población (un 15% para las mujeres y un 10% para los hombres) y la crisis económica, de la que no se libran pues desde 2001 dependen del dólar.

Por todo ello, López ha destacado la importancia de la cooperación internacional, sin la cual, según ha precisado, no podrían llegar a tantas mujeres para trabajar en favor de sus derechos y apoyarlas en los momentos más difíciles de desastres, temblores, inundaciones y todas las vulnerabilidades a las que están expuestas.