MADRID, 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
Más del 80 por ciento de los jóvenes madrileños de 15 a 24 años centra su ocio en la marcha nocturna y asegura, además, que les compensa salir toda la noche a pesar de los riesgos que esto pueda implicar, según afirma el estudio 'Ocio y riesgos de los jóvenes madrileños' realizado por la Fundación de Ayuda a la Drogadicción (FAD), Obra Social Caja Madrid y el Instituto de Adicciones del Ayuntamiento de Madrid.
La investigación presentada hoy tiene como objetivo analizar las formas de ocio, los riesgos que viven en esos espacios y tiempos de ocio así como las actitudes que mantienen los padres ante los comportamientos de sus hijos.
El director técnico de la FAD, Eusebio Megías, explicó las principales conclusiones así como los datos más relevantes del estudio, entre los que destacó en primer lugar el hecho de que el 70 por ciento de los jóvenes de la región aseguró haberse emborrachado en el último año.
A este dato, que calificó de "significativo", le acompañan en segundo y tercer lugar respectivamente en orden de frecuencia de conductas de riesgo el hecho de viajar con un conductor bebido o drogado (un 45,4 por ciento lo hizo en el último año) y mantener relaciones sexuales con una pareja no habitual sin preservativo (un total de un 25,9 por ciento).
En cuanto a los perfiles, el estudio señala que, a pesar de que en general son los hombres los que parecen siempre más proclives a protagonizar comportamientos de riesgo, en realidad hay un grupo de mujeres que se sitúa en las máximas frecuencias de conductas peligrosas como pueden ser el sexo sin protección o verse implicadas en peleas.
El estudio indica asimismo las sustancias más consumidas por los jóvenes madrileños en el último año siendo el alcohol y el cannabis los productos estrella en este sentido. Megías señaló en este punto la importancia de los datos referentes al consumo de cannabis en la región que muestran cómo un 7,4 por ciento lo hicieron en fin de semana frente al 8,8 por ciento que afirmó consumir esta sustancia a diario. "El cannabis se consume ya más a diario que en fin de semana, se ha normalizado hasta tal punto que ya no se asocia a los momentos de ocio y diversión nocturno", advirtió.
En cuanto a su postura frente a los principales riesgos que conlleva la noche, Megías aseguró que los jóvenes se muestran "ambiguos". "Por un lado los riesgos se aceptan como una necesidad vital, algo inevitable que puede tener funciones positivas y por otro reconocen los peligros y dan cierta importancia a la prudencia", señaló Megías.
OCIO DE BAJA CALIDAD
La investigación muestra cómo entre las actividades que los jóvenes realizan con mayor frecuencia se encuentran escuchar música (65,6 por ciento) y estar con los amigos (62,6 por ciento). "Los datos muestran cómo visitar museos o colaborar con ONGs ocupan los últimos puestos con lo que podemos concluir que dedican poco tiempo a lo que comúnmente se considera 'ocio de calidad'", indicó.
Como conclusión, Megías señaló que lo que ha cambiado en la sociedad no son los jóvenes sino el contexto. "Los jóvenes son iguales a cómo han sido los jóvenes siempre, lo que ocurre es que nunca se ha enfatizado tanto el ocio como ahora, nunca se ha relativizado tanto la importancia del esfuerzo para trabajar el futuro como ahora y nunca ha habido una industria del ocio que fomente tanto la experimentación", zanjó.
La actitud de los padres ante estas conductas de riesgo de sus hijos, Megías la calificó de "perplejidad impotente", señalando que, mientras por un lado se sienten alarmados y algo ansiosos ante las amenazas que rodean a sus hijos, por otro se sienten "confortados y relajados" por la creencia de que sus hijos "son diferentes" y "están bien educados".
UN LLAMAMIENTO A LA RESPONSABILIDAD
En la presentación del estudio estuvieron presentes junto al ya citado director técnico de la FAD, Eusebio Megías, el coordinador general de salud del Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Tordecilla y el director general de la FAD, Ignacio Calderón.
En su intervención, Tordecilla señaló que la búsqueda del riesgo por parte de los jóvenes "es algo normal", señalando que la importancia radica en la forma de manejar esta realidad por parte de la sociedad. Asimismo, hizo un llamamiento general a la responsabilidad para que los publicistas, guionistas y creativos entre otros no muestren en las series como normal algo que "no es normal".
"Estos 'buitres' que mandan mensajes sin escrúpulos a los jóvenes a través de la publicidad o los que venden alcohol a menores complican enormemente la labor de las autoridades, administración e instituciones", señaló Tordecilla.
Recordó, asimismo, que para que este ocio nocturno de riesgo cambie es necesaria una reforma estructural de la sociedad y recordó que gracias a la "Ley Antibotellón" puesta en vigor durante la presidencia de Alberto Ruiz-Gallardón de la Comunidad de Madrid, se consiguió avanzar en este cambio frenando la edad de inicio de los jóvenes en la práctica del botellón.
Finalmente, el director gerente de la FAD anunció que han planteado una propuesta a los guionistas para debatir los estereotipos que proponen en las series de televisión para poder llegar a un acuerdo común y a unas conclusiones. "Es un camino lento y difícil pero es la única forma de que el barco cambie de rumbo", concluyó.
