Actualizado 30/06/2010 16:17

Amnistía Internacional denuncia las amenazas y asesinatos contra activistas y periodistas en la RDC

La organización habla de la "terrible situación de Derechos Humanos" que sufre el país, que celebra sus 50 años de independencia


MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado las amenazas de muerte y los asesinatos de que son objeto los activistas y periodistas de la República Democrática del Congo (RDC) y ha advertido, coincidiendo con las celebraciones del quincuagésimo aniversario de la independencia del país, de la "terrible situación de Derechos Humanos" que vive la RDC, con dos millones de desplazados y numerosos casos de homicidio ilegítimo, tortura y violación, sobre todo en la región oriental.

Los festejos por la independencia se celebran este miércoles, apenas unos días después del funeral --que tuvo lugar el 26 de junio-- de Floribert Chebeya Bahizire, el activista de Derechos Humanos más destacado del país, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado al día siguiente de ser citado para asistir a una reunión con la Policía de Kinshasa, según denunció la organización en un comunicado.

"Las amenazas de muerte contra defensores de Derechos Humanos y periodistas en la República Democrática del Congo aumentan a un ritmo alarmante", declaró la responsable de Amnistía Internacional en la RDC, Veronique Aubert. "Es una vergüenza que se esté silenciando a las voces más necesarias", agregó.

Floribert Chebeya era el director ejecutivo de una de las mayores organizaciones de Derechos Humanos del Congo y había estado trabajando en varios temas delicados en los que estaba implicado el jefe de la Policía, general John Numbi. Su cadáver fue hallado en su automóvil la madrugada del 2 de junio.

El activista había declarado a Amnistía Internacional que creía que lo habían estado siguiendo y que estaba sometido a vigilancia por las fuerzas de seguridad. El funeral de Floribert Chebeya se celebró el 26 de junio, Día Internacional en Apoyo a las Víctimas de la Tortura, por deseo de su familia, que cree que murió como consecuencia de la tortura.

Amnistía Internacional ha pedido al Gobierno congoleño que cree una comisión independiente para investigar la muerte de Chebeya y el paradero de su conductor, que sigue desaparecido. "Las autoridades han hecho caso omiso de estos llamamientos", según la organización.

AMENAZAS Y ASESINATOS

En el último año se ha venido produciendo un aumento de las amenazas de muerte contra activistas de Derechos Humanos y periodistas en la República Democrática del Congo, según AI. Estas amenazas se suelen enviar por teléfono o en mensajes de texto.

En agosto y septiembre fueron enjuiciados sendos activistas después de que sus respectivas organizaciones publicaran informes críticos hacia las autoridades. Según el comunicado de Amnistía, numerosos activistas más han sido detenidos arbitrariamente y sometidos a malos trabajos bajo custodia.

Aparte, el mes que viene se conmemora el quinto aniversario de la muerte de Pascal Kabungulu, otro destacado activista de Derechos Humanos que fue asesinado en julio de 2005 por un grupo de hombres armados que irrumpieron en su domicilio, lo sacaron de su dormitorio y lo mataron a tiros delante de su familia.

El juicio de los hombres acusados de este homicidio lleva casi cinco años paralizado. "Estos hombres, entre los que figuran soldados, además de altos mandos militares y destacados políticos, siguen en libertad a pesar de la promesa pública del presidente Joseph Kabila de que se haría justicia", denunció AI.

"TERRIBLE SITUACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS"

"Es una hipocresía que Congo celebre festejos en todo el país sin reconocer la terrible situación de los Derechos Humanos", afirmó Veronique Aubert. "El pueblo congoleño está atrapado entre una paz insatisfactoria y la amenaza de nuevas crisis", advirtió.

"Hasta que el Gobierno del Congo ponga en primer lugar los intereses de sus ciudadanos, la seguridad y el respeto a los Derechos Humanos seguirá siendo un sueño lejano", manifestó.

En Congo hay aún alrededor de dos millones de personas desplazadas debido a los combates que siguen enfrentando al Ejército y los grupos armados. Los homicidios ilegítimos, la tortura y las violaciones continúan abundando en la región oriental del país, según el comunicado.

La misión de la ONU (MONUC), la mayor misión de paz de la ONU en el mundo, con sus 20.500 efectivos, sigue siendo la única fuerza en la RDC capaz de ofrecer cierta protección a la población civil. El Dobierno ha pedido en reiteradas ocasiones su retirada. Amnistía Internacional teme que la retirada de la MONUC provocará un mayor deterioro de la situación de los Derechos Humanos en el país.