Actualizado 11/03/2010 13:11

Cepesca acusa de Bruselas de "vender" el sector pesquero a los ecologistas

MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

La Confederación Española de Pesca (Cepesca) manifestó hoy su "rotunda oposición y condena" a la decisión del Comité de Representantes Permanentes de la UE (Coreper) de apoyar la inclusión del atún rojo en el Apéndice I de la Convención Internacional para la Conservación de la Flora y la Fauna Silvestre (CITES), y acusó a la UE de "dejar vendido al sector pesquero comunitario a las organizaciones medioambientalistas".

En un comunicado, la patronal atacó duramente esta decisión, de la que aseguró que "carece de rigor científico, ignora las recomendaciones de sus órganos especializados, es drástica, desproporcionada y supone un toque de gracia para las Organizaciones Regionales de Pesca, competentes para la gestión de pesquerías".

En este sentido, el secretario general de Cepesca, Javier Garat, aseguró que la apoyar la prohibición de comercio para el atún rojo es una de las decisiones "más graves y lesivas" para el sector de las adoptadas por la UE en los últimos años, y advirtió que sienta un nefasto precedente, al haber primado los intereses políticos y la presión medioambientalista.

"Es lamentable que los políticos se hayan preocupado más por su imagen y por quedar bien con los ecologistas que por defender posiciones basadas en criterios objetivos y fundamentados científicamente, cediendo al chantaje y a las amenazas de los grupos radicales conservacionistas", lamentó.

En este sentido, Cepesca exigió a la Unión Europea coherencia en sus políticas y seguridad jurídica para su actividad, al tiempo que calificó las condiciones propuestas por la UE para el atún rojo como "trampa inaceptable".

"Pensar que el comité permanente de CITES vaya a dar el visto bueno al trabajo de ICCAT una vez que se conozca su evaluación sobre la evolución del 'stock' de atún rojo y los resultados de su plan de recuperación, que se conocerán en noviembre de 2010, no es más que un brindis al sol, ya que una vez que se meta el atún rojo en CITES no habrá manera de sacarlo", advirtió Garat.

Del mismo modo, en relación a la presunta exclusión de la flota artesanal, el representante de los armadores denunció que "ni siquiera han sido capaces de concretar su definición".