Actualizado 18/08/2010 16:02

El coordinador de emergencias de Cáritas Pakistán dice que los afectados tardarán meses en recuperarse

Inundaciones en Pakistán
CÁRITAS

MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

El coordinador nacional de emergencias de Cáritas Pakistán, Eric Dayal, afirmó este miércoles que a los paquistaníes afectados por las inundaciones les llevará un par de meses volver a recuperar la normalidad.

Dayal realizó estas declaraciones tras hacer una visita a la ciudad de Nowshera para supervisar una distribución de asistencia y realizar una encuesta. "En el camino vimos lugares donde las aguas estaban al nivel del tejado de las casas", afirmó. En ese momento, no había llovido durante dos días y las aguas estaban bajando en algunos lugares, detalló.

Los artículos que repartió la organización fueron identificados en la evaluación de la semana anterior, y entre los suministros se incluyeron colchones, almohadas y sábanas, y diferentes artículos de aseo. Además, también se repartieron utensilios de cocina, como cacerolas, platos, cubiertos y también una "tawas", que es una sartén en la que la gente puede hacer "chapatis", un pan típico.

Dayal detalló que se consiguió distribuir asistencia al menos a 230 familias, e indicó que las casas que se dispersaban a lo largo del cauce del río han sido completamente arrasadas. "Una de las grandes dificultades a las que se enfrentan los adultos es a la pérdida de sus puestos de trabajo. No tienen dinero y no saben si recibirán la paga. Incluso si se les paga, no saben si será todo lo que normalmente reciben", apuntó. "Las mujeres mantienen la calma, pero me confesaron la gran dificultad que les supone no tener un hogar y no tener una vida familiar", prosiguió.

"Creo que a la gente que conocí en Nowshera les llevará al menos un par de meses volver a cualquier tipo de vida normal", aseveró este coordinador de Cáritas, que realizó un llamamiento urgente a la comunidad internacional para recordar que la tragedia que vive Pakistán no tiene precedentes. Además, aseguró que los voluntarios y trabajadores desplazados en el terreno de Cáritas en la zona siguen trabajando para que la ayuda llegue a todos los afectados.