Actualizado 19/04/2013 21:08

Ecologistas en Acción considera que la Ley de Evaluación Ambiental esconde la mercantilización de la biodiversidad

Cabañeros
EUROPA PRESS/DIPUTACIÓN CIUDAD REAL


MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

La organización Ecologistas en Acción ha denunciado que el borrador de la Ley de Evaluación Ambiental "da varios pasos atrás" en materia de prevención y califica de "especialmente peligroso para la biodiversidad los bancos de conservación" porque en realidad es un mercado financiero de los activos medioambientales.

Por ello, exige al Gobierno que renuncie a crear estos "mercados financieros" y busque otras fórmulas basadas en el respeto a las leyes y procedimientos ambientales para hacer frente a las medidas derivadas de la normativa de impacto ambiental.

Así, considera que estos mercados "no aportan nada bueno a la conservación" y mejora de la biodiversidad sino que, por el contrario son "un caldo de cultivo idóneo para la especulación y la pérdida de control legal sobre los recursos naturales más sensibles".

Además, otro paso atrás es el recorte de plazos porque "afectará a la calidad de las evaluaciones ambientales y a las posibilidades de la participación pública", al tiempo que merma el carácter objetivo y determinante de la evaluación de proyectos.

Asimismo, el borrador de la Ley destaca la disposición adicional por la que se crean los bancos de conservación que el Ministerio define como "mecanismo para evitar la pérdida neta de biodiversidad a través de medidas de compensación basado en el mercado".

De este modo, lo que en principio se plantea con la aparentemente inocente intención de promover mejoras ambientales en el medio natural que puedan ser adquiridas por promotores de proyectos impactantes que requieran de medidas compensatorias, esconde una "realidad doblemente perversa".

Concretamente, critican que de entrada se asume y facilita que proyectos que no debían ser viables por su elevado impacto ambiental, requieren medidas compensatorias, que se pueden desarrollar comprando unos créditos valorados en función de las mejoras ambientales que se lleven a cabo.

En este sentido, Ecologistas en Acción explica que esta "supuesta mejora ambiental adquirida no aportaría nada a la biodiversidad, por cuanto sería una compensación de un daño ambiental grave". Es decir, el efecto neto sobre la biodiversidad, en el mejor de los casos, sería nulo, cuando no negativo, ya que "nada garantiza que la mejora vaya a funcionar o sea realmente equivalente al daño a compensar".

PERVERSO MECANISMO DE MERCADO

Igualmente, califica de "realmente perverso" el mecanismo por el que se crean y negocian los créditos del banco de conservación y que no es más que un mercado de títulos sobre activos ambientales otorgados a titulares de terrenos, que se transmitirían en régimen de libre mercado y podrían ser negociables por terceras partes en mercados secundarios. Se crearía así un mercado que a último queda en manos de lo que decidan los mercados y, por lo tanto, de los intereses puramente económicos y especulativos.

"Conservación de la biodiversidad y mercados financieros no casan en absoluto, responden a necesidades y mecanismos de funcionamiento bien diferentes. Además, a nadie le puede caber ninguna duda de quien tiene las perder en esta posible relación", subraya la organización.

De hecho, asegura que hay casos parecidos que muestran como los mercados son "incapaces" de aportar otra cosa que especulación a los activos ambientales. En este contexto, pone de ejemplo el comercio de derechos de emisión de CO2 que es una "burbuja especulativa creciente que ni el Parlamento Europeo ha sido capaz de resolver".