Actualizado 21/04/2010 11:51

Ecologistas en Acción exhibe hoy en Salamanca su exposición 'SOS. Frenemos el cambio climático'


SALAMANCA, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -

Ecologistas en Acción de Salamanca, con motivo de celebrarse hoy el Día de la Tierra, exhibirá en el patio alto de la Biblioteca Pública del Estado 'Casa de las Conchas' su exposición 'SOS. Frenemos el Cambio Climático', cuyo objetivo es acercar a la ciudadanía los efectos derivados de nuestro actual modo de vida cuya manifestación más evidente es el cambio climático.

Junto a esta exposición se mostrarán también algunas fotos seleccionadas del concurso fotográfico de denuncia ecológica sobre Movilidad y Cambio Climático, según informaron a Europa Press fuentes de EA.

Entre las fotografías seleccionadas podrán verse las imágenes premiadas por el fallo del jurado el día 15 de abril de 2010, y junto a ellas se expone una pequeña muestra fotográfica fuera de concurso titulada 'Riberas olvidadas, ríos muertos: el Tormes a su paso por Salamanca', que pretende ser una denuncia visual del estado de abandono en el que se encuentra la orilla del río Tormes en Salamanca.

Además, miembros de Ecologistas en Acción situarán delante de la Biblioteca Pública del Estado 'Casa de las Conchas' una serie de mesas informativas para acercar a toda la ciudadanía este y otros problemas, desde las 19.00 a las 21.00 horas.

En esta actividad se representará una pequeña performance que recogerá las impresiones y deseos que tiene la ciudadanía salmantina sobre la crisis ambiental a la que nos enfrentamos.

Ecologistas en Acción de Salamanca quiere evidenciar así cómo los problemas del deterioro del medio ambiente y la injusticia social tienen su origen en las pequeñas cosas y comportamientos diarios.

Se ha escogido como ejemplo de estas conductas el excesivo uso del vehículo privado que genera en torno al 40% de las emisiones de gases de efecto invernadero de nuestro país, sin olvidar los graves deterioros que produce la extracción del combustible en países empobrecidos donde sus ciudadanos no reciben los beneficios de su venta, sino que van a parar a grandes multinacionales sostenidas por las ventas de estos productos en los países privilegiados como España.