VALENCIA, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Diversas familias valencianas acogen este verano durante los meses de julio y agosto, a unos 550 niños saharauis que viven en campos de refugiados. Esta iniciativa, llevada a cabo mediante el programa 'Vacaciones en Paz', pretende acercar a estos niños "otra realidad distinta a la que ya conocen".
Así lo indicó hoy en declaraciones a los medios de comunicación la vicepresidenta de la Federación de Asociaciones de Solidaridad con el Pueblo Saharaui de la Comunitat, Pilar Macías, quien acompañó a una representación de estos niños a visitar al delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Ricardo Peralta.
Macías explicó que el programa "consiste en sacar a los niños saharauis que están en campos de refugiados y acogerlos en familias de toda España". Del total, indicó que a la Comunitat han llegado unos 550. Señaló, en este sentido, que al principio tenían miedo por el problema de crisis, por si faltaban familias, "pero al final han faltado niños", dijo.
Mediante este programa, los niños podrán pasar una revisión médica en España, "conocer los grifos, la luz eléctrica, el agua corriente y ver los árboles y ríos dibujados en sus libros de la escuela pero que nunca han visto en la realidad". Macías explicó que los niños "disfrutan mucho aquí, con la piscina", y porque llevan durante dos meses una alimentación "variada", ya que allí "comen elemento perecederos y no prueban casi la verdura, la fruta y los alimentos frescos".
Asimismo, resaltó que este programa "enriquece mucho a las familias", porque "los hijos ven que hay otros niños como ellos que tienen otra forma de vida mucho más dura". "Es un programa --agregó-- que merece la pena vivir", sentenció.
Por su parte, Peralta mostró su voluntad de que estos niños "puedan tener acceso durante unos meses a esas condiciones que puede proporcionar este país, en cuanto a salud, idioma, y a conocimiento de una realidad absolutamente distinta", afirmó.
También agradeció a las familias su acogimiento, porque "transmiten la mejor imagen de España", ya que "sacrifican o dedican sus vacaciones a recoger a niños ajenos a ellos, y se preocupan por su salud, su bienestar y su integración", a pesar de que saben "que en un plazo corto se van a ir". "Es --agregó-- una imagen de solidaridad y de compromiso".
"EJEMPLO DE ESPAÑA"
Por otro lado, el delegado del frente polisario de la Comunitat, Mohame el-Mamún, coincidió con Peralta en asegurar que las familias de acogida "son un ejemplo de toda España en aplicación de la solidaridad, porque abren sus hogares a los niños, y también sus corazones".
Asimismo, agradeció al delegado del Gobierno en la Comunitat las "facilidades" que pone para que los niños puedan obtener el visado correspondiente para venir a España, e hizo un llamamiento al Ejecutivo para que ayude a estos niños y a sus padres a regresar a su país "como hombres libres".
