Actualizado 23/02/2010 18:37

Un grupo de Derechos Humanos nigerino pide que se juzgue a Tandja por corrupción y por violar la Constitución


MADRID, 23 Feb. (EUROPA PRESS) -

Fussad, un grupo nigerino defensor de los Derechos Humanos, ha pedido que se juzgue al presidente derrocado Mamadou Tandja por corrupción y por violar la Constitución de Níger. Tandja, que fue expulsado del poder la semana pasada por un golpe de Estado, modificó la Carta Magna el año pasado para poder seguir como presidente más allá del fin de su mandato.

Esta organización, aliada de los partidos opositores que han celebrado el golpe militar, criticó, según informa la cadena británica BBC, que Tandja haya repartido contratos entre empresas extranjeras de los sectores del petróleo y el uranio. Sin embargo, los partidarios del presidente derrocado argumentan que durante los diez años que ha estado gobernando, Tandja ha dado estabilidad económica a Níger.

En ese periodo, la empresa francesa de energía Areva ha comenzado a trabajar en la que es la segunda mina más grande del mundo, un proyecto en el que ha invertido unos 1.500 millones de dólares. Además, la Empresa Nacional de Petróleo de China firmó en 2008 un contrato de 5.000 millones de dólares para extraer petróleo durante tres años.

En cuanto a la Constitución, la junta militar que gobierna ahora Níger --que se hace llamar Consejo Supremo para la Restauración de la Democracia (CSRD)-- ha dicho que va a supervisar la redacción de un nuevo texto que deberá ser aprobado en referéndum antes de celebrar los comicios.

Ayer anunció que el líder del golpe, Salou Djibo, asumirá todos los poderes legislativos y ejecutivos hasta la celebración de elecciones aunque nombrará un gobierno y un primer ministro para que dirijan el país durante el periodo de transición. Aún no existe un calendario para el proceso de transición ni se ha fijado la fecha de los comicios.

Mientras, Tandja permanece en el palacio presidencial de Niamey y el Comité Internacional de la Cruz Roja está intentando conseguir que los golpistas le permitan verle para comprobar en qué condiciones se encuentra retenido.

Por otro lado, el Ejército ha rodeado con tanques la vivienda del general Moumouni Boureima, antiguo jefe del Ejército, que se ha negado a apoyar el golpe de Estado. Según la BBC, la presencia militar ha aumentado en torno a las bases del Ejército en la capital y al palacio presidencial, pero las patrullas son limitadas y en el resto de Niamey no hay puestos de control.