MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) pidió este martes a las autoridades centrales y locales de Kirguistán que mejoren la situación y las condiciones de regreso para cerca de 75.000 desplazados que se vieron expulsados de sus lugares de origen por la violencia que sufrió el sur del país el pasado mes de junio.
ACNUR también hizo un llamamiento de 23 millones de dólares, parte de uno mayor que asciende a 96,4 millones, que está siendo presentado en Bishkek. "Estos fondos se necesitan con urgencia para proporcionar refugio y financiar los proyectos de protección en el sur de Kirguistán", afirmó un portavoz de la agencia, Melissa Fleming. "Los nuevos fondos nos permitirán seguir con nuestra protección y asistencia legal y humanitaria a la población afectada hasta finales de año. Las actividades incluyen el restablecimiento de la identificación, el estatus civil y de los documentos", añadió.
Según ACNUR, muchos de los desplazados han informado de episodios de detención y acoso, además de las dificultades para acceder a los servicios médicos básicos junto con la ausencia de electricidad. "Mensajes similares llegan hasta nosotros a través de nuestras líneas telefónicas gratuitas, que funcionan 24 horas al día", explicó.
Esta agencia de la ONU elogió las últimas medidas tomadas por el Gobierno para establecer equipos móviles para visitar y asistir a las comunidades afectadas por la violencia el pasado mes de junio, pero también señaló que la "reconstrucción de las casas y los refugios de emergencia son de una preocupación especial".
Muchos desplazados han mostrado sus reservas sobre los nuevos planes de las autoridades locales para construir edificios de varias plantas en los que podrán alojarse las personas que perdieron sus casas, reemplazando a los barrios tradicionales, prosiguió. "La mayoría quiere recuperar lo que perdieron, una casa familiar que respete sus costumbres y su forma de vida. Lo más importante, los desplazados piden asistencia para poder reconstruir sus casas antes del invierno", añadió.
ACNUR termina su comunicado especificando que el llamamiento también cubrirá las necesidades humanitarias para cerca de 75.000 desplazados durante el próximo invierno, ante el que el principal desafío para el programa de alojamiento es el escaso tiempo para implementarlo antes de que llegue y de cara a las bajas temperaturas que sufre el país.
