Actualizado 14/01/2010 14:59

La Central Nuclear de Zorita (Guadalajara) recibe el visto bueno de Medio Ambiente para su desmantelamiento y clausura

GUADALAJARA, 14 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino ha evaluado favorablemente el proyecto de desmantelamiento y clausura de la Central Nuclear José Cabrera, en Almonacid de Zorita (Guadalajara), siempre y cuando se autorice en las condiciones señaladas en la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y sin perjuicio del cumplimiento de las condiciones que establece el Consejo de Seguridad Nuclear en su informe, porque quedará adecuadamente protegido el medio ambiente y los recursos naturales.

El objeto del proyecto es la descontaminación, desmontaje y demolición de las estructuras de la Central Nuclear José Cabrera (CNJC), así como la retirada de los materiales residuales que se generen en el proceso, para dejar el emplazamiento en condiciones de ser liberado. El estudio y la evaluación, así como el seguimiento y control del impacto radiológico ambiental de este proyecto de desmantelamiento es competencia del Consejo de Seguridad Nuclear y está contemplado en las condiciones que establezca este organismo.

El estudio, la evaluación, el seguimiento y el control del resto de los impactos ambientales de tales obras es competencia de la Dirección General de Calidad y Evaluación Ambiental del MARM. De modo que la DIA se ha elaborado de forma coordinada por ambos organismos dentro de sus respectivas competencias. El alcance de la presente DIA se corresponde con los impactos convencionales derivados del desmantelamiento de la CNJC. El proyecto supondrá el desmantelamiento total inmediato de la central.

De las tres alternativas contempladas, tras el proceso de evaluación, se ha seleccionado la denominada Alternativa 1, consistente en el desmantelamiento total inmediato, dejando el emplazamiento liberado para su uso futuro. Las ventajas que ofrece esta opción son: La eliminación del riesgo radiológico que comporta la instalación y la liberación total del emplazamiento se consigue en el plazo más corto y los residuos radiactivos generados en el desmantelamiento se pueden gestionar de manera inmediata en el Centro de Almacenamiento de El Cabril.

Además, esta alternativa permite contar con la colaboración del personal de explotación de la central que posee el conocimiento detallado de la instalación y recuperar el entorno ambiental favoreciendo el ulterior desarrollo socioeconómico mediante la utilización del emplazamiento para los futuros usos previstos, informó el Ministerio en nota de prensa.

La DIA aprobada establece, entre otras, condiciones específicas de protección ambiental. Para el control de las emisiones de partículas se instalará una red de vigilancia de la calidad del aire. En relación al impacto acústico, en ningún caso se superará los valores límites de ruido establecidos en la legislación vigente y se

realizaran diferentes campañas de medición. En caso de superarse los valores limites se implantaran medidas de apantallamiento o amortiguamiento adicionales.

Para la protección de la red hídrica se diseñará un plan para el control y vigilancia de los puntos de vertidos. Así, sólo podrán incorporarse al río aquellos vertidos autorizados por la Confederación Hidrográfica del Tajo en las condiciones que fije este organismo. Con respecto al control de la calidad de aguas superficiales y subterráneas, las actuaciones del proyecto se adecuaran a las condiciones que establezca la Confederación y se deberá contar con la preceptiva autorización administrativa de este organismo para cualquier actuación en el Dominio Publico Hidráulico.

Debido a que la parcela del emplazamiento esta antropizada y a que todas las obras se llevaran a cabo en su interior, las posibles afecciones a la fauna y flora serían indirectas. No obstante se aplicaran las medidas correctoras y protectoras necesarias. Además, para preservar los espacios naturales de la Sierra de Altamira, el proyecto incluirá un plan de protección contra incendios que evite su

propagación más allá del perímetro de las obras.