Actualizado 17/12/2013 22:34

Fernández Díaz pide que Frontex no se convierta en una agencia de rescate de inmigrantes en el mar

Alega que provocaría un efecto llamada entre las mafias

BRUSELAS, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha pedido este jueves que la Agencia Europa de Control de Fronteras (Frontex) no se convierta en una agencia de rescate de inmigrantes en el mar porque ello "desnaturalizaría" su función y provocaría un efecto llamada para las mafias.

Fernández Díaz ha defendido esta posición junto con Francia en el debate que han tenido los ministros del Interior de los 28 sobre las propuestas de la Comisión para prevenir que se repitan catástrofes humanitarias como el naufragio en octubre de un barco con inmigrantes frente a las costas de la isla italiana de Lampedusa.

"La agencia Frontex es una agencia europea dedicada a garantizar el control de las fronteras exteriores de la Unión. Se desnaturalizaría si se convirtiera en algo así como una agencia de salvamento y rescate", ha dicho Fernández Díaz en declaraciones a la prensa tras participar en el Consejo de Interior de la UE.

En opinión del ministro del Interior, Frontex debe atender el "principio del derecho humanitario" de auxiliar a las personas en riesgo de morir ahogadas. Pero eso no debe llevar a convertirla en una agencia de salvamento "porque eso generaría un efecto llamada y sería peor el remedio que la enfermedad".

"Animaría a las mafias a poner en embarcaciones en la mar a personas en la confianza de que, una vez en la mar serían salvadas, rescatadas y llevadas a su destino. Por eso he insistido en esta posición, que por cierto ha sido plenamente compartida por Francia", ha subrayado Fernández Díaz.

El Ejecutivo comunitario ha propuesto reforzar las operaciones de Frontex en el Mediterráneo desde Chipre a España en los próximos meses con el objetivo de prevenir la muerte de inmigrantes en naufragios como el registrado en octubre frente a las costas de la isla italiana de Lampedusa. Para ello, Bruselas reclama a los Estados miembros que aporten 14 millones de euros extra al año, así como más medios como barcos o aviones.

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