MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Jordania ha señalado este jueves que está preparado para cerrar su frontera con Siria "como último recurso" en caso de que el conflicto en el país amenace con expandirse o si la situación humanitaria se agrava, aunque ha subrayado que mantendrá por el momento las puertas abiertas a los cientos de refugiados que llegan al país a diario.
"Va en interés de nuestra seguridad nacional, y estamos preparados para cerrar la frontera si, Dios no lo quiera, estalla la anarquía en Siria o se alcanza un nivel sin precedentes de crisis humanitaria", ha dicho el portavoz del Gobierno, Samih Maaytah, quien es también ministro de Estado y Comunicación.
"Sin embargo, si la situación continúa como hasta ahora, mantendremos las fronteras abiertas", ha señalado Maaytah, según ha informado el diario 'The Jordan Times'.
En este mismo sentido se ha pronunciado el primer ministro jordano, Abdulá Ensur, quien ha resaltado que Amán no permitirá la entrada de más refugiados al país en caso de que se produzca un mayor deterioro de la crisis política en Siria.
"Preferimos que los sirios permanezcan en su tierra. Es mucho mejor para sus países y no les animaremos a hacer lo contrario", ha manifestado Ensur, antes de agregar que las autoridades jordanas evitarían la entrada de refugiados a través de la creación de una 'zona tapón' entre ambos países.
Las autoridades jordanas han cifrado en más de 3.000 el número de refugiados que han entrado en el país en las últimas 48 horas, situando en 7.000 el número de entradas en la última semana. Jordania acoge a 295.000 de los alrededor de 550.000 sirios que han huido del país y han cruzado las fronteras de los países vecinos: Líbano, Irak y Turquía.
El aumento del flujo de refugiados a causa del recrudecimiento de los enfrentamientos entre rebeldes y fuerzas de seguridad sirias ha provocado que Amán acelere los preparativos para abrir un nuevo campamento de refugiados en el país, que estará ubicado en los alrededores de la localidad de Zarqa.
La semana pasada, el temporal que azotó el país provocó que las autoridades jordanas tuvieran que trasladar a alrededor de 2.000 refugiados sirios del campamento de Zaatari a viviendas prefabricadas.
Apenas un día antes, centenares de refugiados se enfrentaron a las fuerzas de seguridad jordanas en el marco de las protestas provocadas por la mala situación que atraviesa el lugar a causa de las inclemencias climatológicas, que provocaron que centenares de tiendas quedaran sumergidas.
Naciones Unidas calcula que desde marzo de 2011, cuando comenzó el levantamiento popular contra el régimen de Bashar al Assad, unas 60.000 personas han muerto a causa de los combates entre las fuerzas gubernamentales y rebeldes en Siria.
