Actualizado 20/12/2007 18:52

La Junta consigue conservar durante las obras en la Iglesia del Salvador (Sevilla) la colonia de cernícalo primilla

SEVILLA, 20 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Consejería de Medio Ambiente, en colaboración con la Comisión para la restauración de la Iglesia del Salvador, ha logrado la conservación de la colonia de cernícalo primilla (Falco naumanni) que habita en este templo sevillano durante las obras de restauración acometidas en este edificio desde 2004.

En un comunicado, el departamento del ramo informó de que las medidas planteadas por Medio Ambiente al equipo encargado de las obras de rehabilitación han conseguido proteger la población de esta rapaz amenazada que anida en las paredes externas de esta iglesia, compuesta en la actualidad por un total de 40 parejas.

De este modo, desde el comienzo de los trabajos, la coordinación entre la Delegación de Medio Ambiente y el equipo director de la restauración ha permitido garantizar el futuro de la colonia, una de las más importantes de Sevilla y su provincia.

Las medidas han permitido conjugar los plazos y objetivos en la ejecución de las obras con la conservación de esta especie, minimizan los efectos ambientales en su hábitat y respetando al máximo los lugares del templo en los que anida.

El equipo de restauración, siguiendo también las instrucciones de Medio Ambiente, ha abierto nuevo mechinales en la parte exterior del edificio, huecos que históricamente habían existido en el edificio. Este aumento en la disponibilidad de mechinales contribuirá a mejorar a partir de ahora su reproducción y, por tanto, su población en este enclave.

Otra de las actuaciones destacadas ha sido la reducción del tamaño de los citados mechinales, adaptando sus dimensiones al tamaño del cernícalo primilla. Esta medida impedirá el acceso a estos huecos de las palomas domésticas, su más directa competidora especie que produce más efectos negativos en la conservación de edificios históricos.

Medio Ambiente propuso también durante la restauración respetar los periodos de reproducción de la rapaz, limitando o suspendiendo los trabajos en el exterior de la iglesia y en la zonas próximas a los nidos durante el periodo de cría (primavera y comienzos de verano).

Con esta iniciativa, se ha conseguido reducir al máximo los posibles perjuicios que las obras pudieran causar a la colonia en esta época especialmente sensible, ya que un fracaso en la cría puede provocar que estas aves desechen para siempre este lugar.