Actualizado 18/08/2008 16:14

Los madrileños podrán conocer la riqueza medioambiental de la capital a través de los cursos que se ofertan en la Escuela de Verano

MADRID, 18 Ago. (EUROPA PRESS) -

Los madrileños que se apunten este año a la Escuela de Verano que organiza el área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid podrán conocer, de forma gratuita, la riqueza medioambiental de la ciudad a través de cursos de medicina natural, anillado científico de aves o construcción de juguetes a partir de material reciclado, según informó hoy el Consistorio madrileño.

Esta Escuela de Verano se basa en juegos y actividades prácticas relacionadas con el medioambiente. Los proyectos se desarrollarán en varias zonas verdes y equipamientos ambientales de Madrid, son gratuitas y están dirigidas a todos los madrileños, niños y adultos.

La edición de este año está especialmente enfocada hacia los niños para ofrecerles una alternativa educativa en época de vacaciones escolares. De esta forma, se ayudará a los padres a compaginar su jornada laboral con el cuidado de sus hijos.

Dentro de las actividades programadas en la Escuela de Verano, se encuentran los campamentos urbanos articulados sobre diferentes temas como, por ejemplo, deporte, arte o naturaleza. Así, los que estén interesados en la flora y las propiedades de las plantas podrán participar, por ejemplo, en un taller de cosmética o de medicina natural, seguir un curso de jardinería ecológica doméstica o acudir a las jornadas de visita al Encinar de San Pedro y a los Centros de Biodiversidad de la Casa de Campo.

También en este emplazamiento se organizarán itinerarios guiados, jornadas y talleres para conocer la fauna del parque. La artesanía con materiales reciclados como el papel o el vidrio completan, junto con las iniciativas deportivas, la oferta de actividades.

En este sentido, los amantes del deporte podrán disfrutar de la naturaleza con los itinerarios en bici en la Dehesa de la Villa o las jornadas Deportes del Mundo, entre otras.

Desde el Ayuntamiento de Madrid aseguraron que "disfrutar y conocer del entorno natural es el primer paso para aprender a cuidarlo y respetarlo", razón por la que se hacen necesarios y constructivos estos talleres, en los que participaron alrededor de 1.500 personas en la edición de 2007.