Advierte de que, además de ayuda humanitaria de emergencia, es necesario "compromiso por erradicar las causas de esta situación"
BILBAO, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Diócesis de Bilbao ha expresado su disposición a colaborar con las administraciones públicas en la acogida a refugiados y ha pedido a las parroquias, comunidades religiosas y entidades eclesiales que "disciernan el tipo de ayuda que pueden ofrecer" en materia de "vivienda, alimentación, educación, acogida y acompañamiento".
El obispo de Bilbao, Mario Iceta, y su Consejo Episcopal han hecho pública una nota tras el reciente llamamiento del Papa para acoger a familias de refugiados, en la que muestra su deseo de "responder" al emplazamiento de Francisco.
En esta línea, la Diócesis muestra su disposición a "colaborar en la acogida a los refugiados" con las administraciones públicas, a quien corresponde, "conforme a los compromisos internacionales adquiridos, otorgar el estatuto jurídico de refugiado y asignar a las personas y familias el lugar de residencia".
Cáritas Diocesana, "con amplia experiencia en la acogida y acompañamiento de inmigrantes y refugiados", será la encargada de coordinar las ayudas que la comunidad cristiana pueda ofrecer y la colaboración con las administraciones públicas y otras entidades que se dedican a la atención de los más desfavorecidos.
El obispo de Bilbao y el Consejo Episcopal subrayan que "las comunidades cristianas están llamadas a colaborar generosamente en la medida de sus posibilidades" y, por ello, piden a las parroquias, a las comunidades religiosas y entidades eclesiales que "disciernan el tipo de ayuda que pueden ofrecer en los diversos ámbitos: vivienda, alimentación, educación, acogida y acompañamiento".
Asimismo, anuncian que "la Delegación de Liturgia ofrecerá sugerencias para que en las Eucaristías del próximo fin de semana la llamada del Papa sea tenida en cuenta en el ámbito oracional y celebrativo".
RESTABLECIMIENTO DE LA PAZ
La Diócesis vizcaína apela a "no olvidar que esta crisis está originada por la injusticia y la guerra" y, en este sentido, señala que, además del ofrecimiento de la ayuda humanitaria de emergencia, es necesario "el compromiso por erradicar las causas que provocan esta situación".
Por ello, concluye, "debemos buscar el restablecimiento de la equidad, la justicia y la paz en los lugares donde se ha originado este terrible drama humano".
