MADRID, 5 Mar. (EUROPA PRESSA) -
El portavoz de la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC), Santiago López, ha advertido de la falta de medios de los agentes en Ceuta y Melilla para hacer frente a la fuerte presión migratoria existente en las fronteras entre Marruecos y España tras la decisión del Ministerio del Interior de prohibir el uso de pelotas de goma.
"Con los medios actuales cómo se puede detener (la llegada de personas de origen subsahariano)", se ha preguntado López en una entrevista en COPE recogida por Europa Press. Según el portavoz de lo Asociación de Guardias Civiles, los agentes "solo cuentan con pistolas, que no van a usar, y una defensa de goma".
López ha asegurado que los guardias civiles "se encuentran indefensos por falta de apoyo político, moral y de medios coercitivos y recibirán palos y pedradas intentando hacer su trabajo lo mejor posible y poniendo el cuerpo a cuerpo".
En cuanto al dato que hizo público ayer el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, sobre 40.000 personas que esperan en Marruecos para entrar en España, el portavoz de los guardias civiles ha asegurado que los datos que baraja el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) hablan de entre 35.000 y 50.000. Se ha mostrado además convencido de que aumentarán el intento de saltos a la valla y que serán más numerosos. "Antes lo intentaban 300 y ahora ya son 1.500 y los centros de Melilla y Ceuta ya quintuplican su capacidad", ha asegurado López.
Sobre la actuación de los agentes de la Benemérita en Ceuta el 6 de febrero, ha insistido que "fue legal" y que se cumplieron los protocolos de actuación vigentes. "Los protocolos vienen del año 2005, y puede ser que estén un poco obsoletos pero son legales y se utilizan medios antidisturbios como los que se usan en cualquier manifestación de cualquier ciudad de España".
Ha reconocido "un cierto descontrol" entre la información difundida por el ministro de Interior y el director general de la Guardia Civil pero ha reiterado que "las versiones son reales, no se disparó a la gente que estaba nadando, la gente se muere porque se lanzan al agua con pocos medios y nadan mal". En su opinión, culpar a la Guardia Civil de la tragedia de Ceuta, en la que fallecieron 15 personas, es "una temeridad y una salvajada".
