Publicado 17/09/2013 14:01

El representante de la CE en España insiste en la necesidad de votar para "defender derechos de la ciudadanía europea"


MADRID, 17 Sep. (EUROPA PRESS) -

El representante la Comisión Europea en España, Francisco Fonseca, ha insistido en la necesidad de participar en las elecciones europeas del próximo 25 de mayo de 2014 a fin de "defender los derechos de la ciudadanía de la Unión Europea" que, según ha recordado, "no son derechos naturales" sino que han sido reconocidos a través del diálogo político en las instituciones europeas.

De hecho, ha asegurado que en Europa "ya hay voces políticas que ponen en cuestión derechos como la libre circulación entre los países europeos o tienen la tentación de dar un palo a las becas Erasmus".

Además, ha destacado que, las próximas elecciones, será la primera vez que los ciudadanos, con su voto, tendrán un instrumento político y democrático que "servirá para algo" y ha indicado que en esta ocasión las familias políticas presentarán un programa electoral y propondrán al presidente de la Comisión Europea.

Fonseca ha participado en la presentación de la XVII edición de la revista Panorama Social, que lleva por título 'La ciudadanía europea en la encrucijada', con motivo del 'Año de la Ciudadanía Europea 2013', a la que también han acudido el director la organización impulsora del documento, la Fundación de las Cajas de Ahorros (Fundecas), Carlos Ocaña; la coordinadora de la publicación, Elisa Chuliá, y la catedrática de Derecho Constitucional de la UNED y autora de uno de los artículos que recoge la nueva edición de 'Panorama Social', Yolanda Gómez.

El documento reflexiona a lo largo de 13 artículos sobre la situación de la UE y sus avances en el contexto de la crisis económica y del deterioro de la confianza de los ciudadanos europeos en sus instituciones.

DISMINUYE LA CONFIANZA

En este sentido, el director general de la Fundación de las Cajas de Ahorros (Funcas), impulsora del documento, Carlos Ocaña, ha recordado que la confianza de los ciudadanos españoles en la UE se ha reducido un 51 por ciento desde 2007 hasta alcanzar el 23 por ciento en 2012, aunque ha destacado también que el 55 por ciento de la población reconoce que la pertenencia a la unión es "positiva" para España.

En relación a estos datos, Fonseca ha indicado que, tanto el rescate bancario que se ha hecho a España como los rescates completos que se han hecho a otros países de la UE han demostrado que, "a pesar de lo malos que son los del norte con los del sur y viceversa, hay un mínimo de red de solidaridad europea que ha hecho que todos vivan esta crisis un poco más abrigados".

"Nadie se imagina lo que hubiera ocurrido con Grecia, Italia o Portugal en una situación sin euro, recuperando su deuda nacional, y pagando su deuda nacional en dólares o en marcos, o lo que habría supuesto a estos países no tener la red común de un mercado interior y de una posibilidad de un plan de rescate", ha subrayado.

Por ello, se ha referido a la "desafección" hacia las instituciones europeas que señalaba el estudio y ha indicado que, a su juicio, no se trata de una situación exclusiva de la UE sino de todas las administraciones, debido a la situación de crisis y a que el ciudadano "se ha vuelto crítico".

Por su parte, Yolanda Gómez ha abordado la baja valoración de las instituciones europeas y ha destacado la ciudadanía europea como uno de los "grandes hitos" de la UE, "a partir del cual se empezó a plantear la necesidad de cumplir ciertos requisitos", más allá de la unión económica.

Así, ha recordado que, además de los derechos implícitos en la ciudadanía de la unión, la pertenencia a la UE otorga un "estatus propio" a quien la posee. Además, ha destacado la "igualdad de todos los europeos" como otro de los logros de la institución.

En todo caso, también ha admitido que uno de los retos de la unión será que los ciudadanos no solo conozcan las ventajas que supone formar parte de ella, sino también "saber aprovecharlas".

Por ello, aunque ha reconocido que las instituciones europeas necesitan "trabajar en muchos ámbitos como la educación, la integración o la cultura" para que los ciudadanos se puedan sentir europeos, ha pedido que "no se culpe a la UE de los problemas de los que no es responsable".

Por último, la coordinadora de la publicación de 'La ciudadanía europea en la encrucijada' ha señalado que "se sabe sobradamente" que la desafección de la ciudadanía a las instituciones tiene relación con la coyuntura de crisis que vive la unión y ha asegurado que la salida de la "encrucijada" en que se encuentra la UE dependerá de las administraciones de esta.