Actualizado 26/05/2020 16:28

El 61% de consumidores espera que las marcas que consumen tengan prácticas de sostenibilidad claras, según un estudio

Cajas de tomates: tomates en rama y tomates de pera en un mercado de Madrid.
Cajas de tomates: tomates en rama y tomates de pera en un mercado de Madrid. - Oscar Cañas - Europa Press - Archivo

Dos tercios de las empresas tienen dificultades para medir el impacto financiero de sus estrategias de sostenibilidad

MADRID, 26 (EUROPA PRESS)

Las nuevas generaciones de consumidores pedirán a las empresas que sean más transparentes a la hora de informar sobre sus prácticas de sostenibilidad y el 61% de los consumidores espera que las marcas que consumen tengan prácticas de sostenibilidad claras por lo que el denominado 'Consumo Consciente' aumentará la necesidad de que las compañías integren la sostenibilidad en sus operaciones comerciales.

Estas son algunas de las conclusiones que se extraen de una encuesta realizada por la sección de investigación del diario The Financial Times para la que se han entrevistado a 200 ejecutivos y 1.500 consumidores entre enero y marzo de 20200, difundida por Smurfit Kappa, empresa del sector del embalaje de papel y cartón ondulado, en la que se añade que dos tercios de las organizaciones tienen dificultades a la hora de medir el impacto final de sus estrategias de sostenibilidad.

La encuesta también revela que, a pesar de que el 65% de los consumidores señala que el precio sigue siendo un factor clave en sus decisiones de compra, más de la mitad de los clientes afirma que en los últimos seis meses ha comprado un producto concreto porque su embalaje era reutilizable o biodegradable y el 56% ha pagado más por un producto o servicio obtenido de forma sostenible.

La encuesta 'Sostenibilidad y rentabilidad: en busca de un equilibrio' analiza los puntos de vista del sector empresarial y de los consumidores con respecto a la sostenibilidad y la forma de adaptar sus hábitos para conseguir un futuro más sostenible.

"Hace años, la sostenibilidad era más bien una cuestión empresarial; ahora son los consumidores los que impulsan los programas de sostenibilidad. A pesar de que realizamos la encuesta justo antes de la pandemia de COVID-19, tenemos cada vez más pruebas de que estas tendencias se mantendrán a medida que las economías empiecen a reabrir. Durante la época prepandemia, cada vez eran más los consumidores que demandaban que los productos se produjeran de forma sostenible y ética, y un estudio reciente realizado en Estados Unidos indica que la COVID-19 no ha frenado esa demanda de productos sostenibles", comenta el vicepresidente de Sostenibilidad y Desarrollo del Grupo Smurfit Kappa, Steven Stoffer.

La influencia del Consumo Consciente se refleja en la encuesta: el 63% de las empresas ha afirmado que la postura de su organización con respecto a la sostenibilidad está orientada al cliente. Sin embargo, la mitad de las compañías indica que sería más beneficioso para su impacto a largo plazo que los consumidores estuvieran más concienciados de los efectos de sus prácticas de sostenibilidad.

El estudio también pone de manifiesto que los consumidores recurren a las marcas para que les ayuden a actuar de forma más sostenible. A pesar de que el 60% de ellos espera que las compañías de los productos que consumen tengan prácticas de sostenibilidad claras, al 69% le resulta difícil identificar si realmente las aplican o no.

De estos datos se desprende que "existe una brecha informativa entre las marcas y los consumidores, lo que indica que las marcas tienen la obligación de comunicar mejor a sus potenciales clientes sus acciones en materia de sostenibilidad. En general, es necesaria una mayor labor informativa y, si las marcas son capaces de conseguirlo, reforzarán muchísimo la relación marca/cliente", explica Stoffer.

SOSTENIBILIDAD Y BENEFICIOS FINANCIEROS

La mejora de la experiencia/satisfacción del cliente es la medida principal que usan las empresas (58%) para valorar la rentabilidad de las prácticas de sostenibilidad. No obstante, la encuesta ha revelado también que solo una quinta parte de las compañías mide actualmente sus programas de sostenibilidad y que 4 de cada 10 organizaciones manifiesta que la medición es el principal impedimento para implantar prácticas sostenibles.

El estudio también muestra que el 82% de los ejecutivos considera que la sostenibilidad es una inversión a largo plazo y no un coste. Además, está cambiando considerablemente las normas contables en casi tres cuartas partes de las empresas. Ahora bien, menos de la mitad de las organizaciones es capaz de vincular la sostenibilidad con sus resultados financieros.

El director financiero de Smurfit Kappa, Ken Bowles, explica al respecto que, "dado que nos adentramos en tiempos marcados por la incertidumbre económica, las empresas están dedicando sus esfuerzos a recuperarse y están centrando toda su atención en la reconstrucción, a medida que se relajan las restricciones sanitarias públicas".

"Teniendo en cuenta lo aprendido en las recesiones anteriores, los dirigentes empresariales tampoco pueden perder de vista el futuro, pues la sostenibilidad tendrá un papel fundamental en sus futuras estrategias comerciales. La crisis climática seguirá existiendo después de la pandemia. La encuesta destaca que, ahora más que nunca, es necesario crear un clima que permita que las empresas adopten prácticas sostenibles sin incurrir en costes adicionales", indica.

Asimismo, Bowles añade que "esto requerirá un diálogo múltiple entre la industria, el Estado, los entes reguladores y los representantes de los consumidores para garantizar que se llega a un acuerdo colectivo que facilite a las empresas el acceso a las ventajas financieras por aplicar prácticas sostenibles".

Por su parte, el CEO de España/Portugal/Marruecos de Smurfit Kappa Ignacio Sevillano confirma que "cada año publicamos los progresos que realiza Smurfit Kappa en sus objetivos de sostenibilidad a largo plazo en nuestro Informe de Desarrollo Sostenible. En él se incluye información sobre transparencia y confirma que nuestros compromisos en materia de sostenibilidad no se quedan en el papel".

"El Grupo se ha fijado unos ambiciosos objetivos a largo plazo en cinco áreas clave en las que puede mejorar la situación en cuanto a sostenibilidad. La posibilidad de que el rendimiento en sostenibilidad sea algo medible, transparente y tangible para las partes implicadas en nuestra actividad es el enfoque que aplicamos desde que empezamos a hacer públicos nuestros progresos en 2007", detalla.

SOSTENIBILIDAD, TENDENCIA DURADERA

Además, la encuesta expone que el 72% de las empresas considera la sostenibilidad como una tendencia duradera. El CEO del Grupo Smurfit Kappa, Tony Smurfit, asegura al respecto que "en los últimos meses, el planeta entero se ha enfrentado a uno de los mayores desafíos para nuestra salud y para nuestros trabajos de todos los tiempos, pero el cambio climático y la sostenibilidad siguen siendo una dificultad real del presente. La población se está dando cuenta de que el tiempo para resolver el problema se acaba. La sostenibilidad debe seguir siendo el punto central de los programas comerciales globales a medida que nos abrimos al futuro".

La sostenibilidad también ofrece oportunidades de crecimiento a las empresas. De hecho, el 83% de las compañías encuestadas describió la sostenibilidad como una oportunidad comercial que deben explotar. "La sostenibilidad es un catalizador del crecimiento, pero las empresas deben encontrar un equilibrio entre las prácticas de sostenibilidad y la rentabilidad si desean conseguir la aceptación de las partes implicadas a largo plazo. Aquellas que aprecian el valor de invertir ahora con una perspectiva a largo plazo tendrán más posibilidades de ganar en el futuro", concluye Smurfit.

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