MADRID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
Acompartir, organización sin ánimo de lucro que ayuda a las organizaciones sociales a reducir la pobreza compartiendo, ha distribuido más de 1,3 millones de productos entre 290 entidades sociales durante el primer semestre de 2018, según informa la asociación.
Hasta la fecha, cerca de 600.000 personas en riesgo de exclusión se han beneficiado de la mediación de Acompartir, que recupera millones de productos nuevos invendidos (excedentes, fin de stocks, devoluciones) donados por empresas y los distribuye a una red de entidades sociales.
El banco de productos trabaja como intermediador para conseguir productos no alimentarios como productos de higiene personal, productos de limpieza, utensilios del hogar, material de papelería o electrodomésticos, donados por distintas compañías.
Garantizan que los productos donados no son reintroducidos en el mercado y se comprometen a entregar los bienes a quien más los necesita. Mediante su labor, además de atender a personas en riesgo de exclusión social, la organización contribuye a reducir los desechos y a preservar el medio ambiente de productos contaminantes.
Desde sus inicios en 2013, el banco de productos ha recibido donaciones de más de 100 empresas como Mercadona, Domtar o Decathlon, entre otras. Gracias a todas las compañías implicadas en la gestión social de los invendidos, Acompartir ha evitado que se destruyan más de 1.200 toneladas de productos.
De este modo, trabajan para ser un intermediario activo y eficaz entre las empresas y las entidades sociales, por lo que están en continuo contacto con las compañías con el fin de localizar los productos más demandados por las entidades sociales.
Entre los beneficiarios de Acompartir se encuentran, entre otros, Fundación Madrina, Fundación San Martin de Porres, Pueblos Unidos, Fundación Balia, Basida, Hogar Don Orione, RAIS, Cottolengo del padre Alegre y Asociación Marillac, que hacen posible que los productos lleguen a aquellas personas que más lo necesitan.
"Un producto que no tiene valor para una empresa, puede cambiar el día a una persona" afirman sus impulsores, que crearon esta organización sin ánimo de lucro para ayudar a las instituciones solidarias a reducir la pobreza compartiendo, un proyecto de emprendimiento social que surge con el fin de establecer un puente de confianza entre el mundo lucrativo y el no lucrativo.
