Publicado 31/01/2020 17:00

La industria cementera avanza en sus compromisos con las políticas de Responsabilidad Social Empresarial

Presentación III Estudio sobre RSE en el sector cementero español
Presentación III Estudio sobre RSE en el sector cementero español - CEMA

MADRID, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -

La industria cementera se encuentra recuperándose de la mayor crisis en su historia aunque lo positivo de la situación es que avanza en sus compromisos con las políticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), según ha determinado el estudio realizado, de manera conjunta, por la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente y Forética (CEMA).

En el estudio se evaluán 22 indicadores económicos y de buen gobierno, ambientales y sociales, así como la contribución del sector a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Además, este año, como novedad, el análisis interno se ha complementado con la consulta a varios grupos de interés, lo que permite aportar una perspectiva externa que ratifica el enfoque actual de las políticas priorizadas desde la industria.

La Fundación CEMA señala que los nuevos datos del estudio trasladan que cada una de las fábricas de cemento, contribuyó con tres millones de euros de media en concepto de impuestos, de los cuales aproximadamente un 32 por ciento corresponden a tributos locales y autonómicos. Además, los datos permiten afianzar el fuerte impacto positivo a escala local de las fábricas, algunas de las cuales tienen una presencia centenaria en las zonas en las que operan.

En relación con la estabilidad en el empleo, la industria cementera aglutina a más de 16.000 trabajadores, de los que el 92 por ciento cuenta con contrato indefinido, una cifra 19 puntos superior a la media española, lo que la convierten en uno de los sectores con la tasa más alta en España.

Por lo que respecta a los indicadores medioambientales, los datos de los últimos cinco años reflejan una tendencia a la baja en las emisiones de CO2, NOx y partículas por tonelada producida de clínker. Así, desde 2014, las emisiones de polvo y las de óxidos de nitrógeno se han reducido en un 20,6 por ciento. El uso de combustibles derivados de residuos en sustitución de los fósiles también mejora sus ratios hasta un 26,5 por ciento de sustitución pese a estar todavía muy lejos de los países líderes en protección medioambiental, Noruega, Austria, Suiza o Alemania, con porcentajes por encima del 60 por ciento.

Además, el estudio revela que el 100% de las fábricas cuenta con sistemas de gestión medioambiental certificados y en su conjunto han aumentado las inversiones en biodiversidad un 48 por ciento respecto a 2016. De hecho, las inversiones en materia ambiental son las que ocupan la posición de mayor relevancia para las empresas, representando un 72 por ciento de las inversiones totales realizadas en materia de RSE.

Por último, en cuanto a las áreas de mejora, el estudio apuesta por la necesidad de potencia el talento femenino, que representa el 11,5 por ciento del total del sector, e incrementar el existente, así como mejorar la comunicación no financiera. Para ello, la CEMA tiene previsto lanzar un proyecto sectorial de igualdad.