MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los alemanes tienen una mejor opinión de España que de Italia, según el ranking de 2013 de la consultora Reputation Institute, que mide la reputación que tienen 62 países entre los ciudadanos de los Estados miembros del G-8 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Rusia).
En esta lista, que se ha dado a conocer en Barcelona, Canadá se sitúa a la cabeza por tercer año consecutivo y España en el puesto 18, retrocediendo dos posiciones respecto a 2012. Por detrás de Canadá, con 76,6 puntos sobre 100, se encuentran Suecia (76,5), Suiza (76,3), Australia (76,1) y Noruega (74,1). En el extremo opuesto, Angola (34,5 puntos), Nigeria (34), Pakistán (28,8), Irán (22,6) e Irak (21,2).
El informe mide la confianza, estima, admiración y buena impresión que generan los países en los 36.000 encuestados y la valoración de un total de 16 atributos agrupados en tres grandes dimensiones (calidad de vida, nivel de desarrollo y calidad institucional).
IMAGEN NEGATIVA DE ESPAÑA EN LOS MEDIOS
Fernando Prado, socio director de Reputation Institute España y Latinoamérica, ha señalado que "el protagonismo, no siempre positivo", que España ha tenido en algunos de los medios más influyentes de la prensa internacional "ha afectado a su reputación" en el estudio de 2013.
Sin embargo, el nivel de reputación de España sigue siendo similar al de países como Francia (17º puesto) y Reino Unido (15º). Además, "en Alemania se nos valora más positivamente que a Italia, por ejemplo", ha subrayado.
Prado ha afirmado que en la "economía de la reputación" en la que vivimos, las percepciones de los consumidores --ya sean turistas o inversores-- determinan sus comportamientos, y estos tienen una incidencia directa en las balanzas comerciales de los países.
El informe muestra la alta correlación que existe entre la reputación de un país y los comportamientos favorables hacía él. Así, una mejora de 5 puntos en el indicador de reputación puede llegar a suponer un incremento de hasta un 11 por ciento en los ingresos por turismo y de hasta un 7 por ciento en inversión extranjera directa.
