JOHANNESBURGO (SUDÁFRICA), 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
La compañía alemana de ingeniería Siemens realizará una inversión adicional en África de 200 millones de euros en los próximos dos años para ampliar su negocio y su estructura de ventas en la zona, medida con la que pretende impulsar su "compromiso" con el continente, según confirmó hoy la compañía en un comunicado.
El presidente y consejero delegado de Siemens, Peter Löscher, aseguró que África ofrece a la compañía "enormes oportunidades de crecimiento". "Como pionero en el campo de las infraestructuras verdes, somos el socio perfecto para liderar los grandes retos de este continente. Las energías renovables en particular, tienen un gran potencial en África", aseguró
La compañía alemana confirmó que los primeros proyectos a gran escala de energía eólica y solar en África se anunciarán probablemente a finales de este año, después de que varios países, como Marruecos y Túnez, hayan creado las condiciones necesarias.
En la celebración del 150 aniversario de la presencia de Siemens en Sudáfrica, Löscher recalcó que la compañía es "líder mundial" en el mercado de la tecnología de la energía y del agua, y subrayó que, para explotar esta oportunidad, está fortaleciendo su relación con las compañías e instituciones africanas.
Así, señaló que uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta el continente es "abastecer agua y electricidad de forma regular", ya que uno de cada dos africanos no tiene conexión a una red eléctrica y una tercera parte de la población tiene problemas para obtener agua potable.
Asimismo, apunta que utilizará la experiencia local para el sector sanitario, en el que, debido a las condiciones financieras, se están construyendo hospitales en colaboración con instituciones privadas. "Este modelo de relaciones público- privadas incrementará el negocio del sector y Siemens espera poder participar como miembro de estos consorcios", añade.
En esta línea, explica que, debido a las condiciones económicas de África, introducirá productos de precio medio desarrollados para países emergentes, que tienen "los mismos niveles de calidad que los productos de gama alta pero con un alcance menor de funciones, lo que les hace más rentables".
