Foto: KUTXABANK
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Se destinarán a familias con dificultades de acceso a un piso y se ubicarán en entornos con elevada demanda de alquiler social
BILBAO, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
Kutxabank y el Gobierno Vasco, a través de la sociedad pública Alokabide, han suscrito un convenio de colaboración por el que la entidad financiera cederá un máximo de 100 pisos para su arrendamiento en régimen de alquiler social.
Según ha afirmado la entidad, las personas beneficiarias de este programa serán aquellas familias y unidades familiares que cumplan los requisitos previstos en la normativa vigente para el acceso a las viviendas de protección oficial y que se hayan inscrito en el Registro de Solicitantes de Vivienda.
En este sentido, ha recordado que, como norma general, los ingresos anuales de las personas que deseen solicitar alguna de estas viviendas de alquiler social no podrán superar los 21.100 euros en el periodo impositivo inmediatamente anterior.
El convenio suscrito por la entidad financiera y la sociedad dependiente del Departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco, establece que Alokabide asumirá la gestión global del sistema de arrendamiento del centenar de pisos, por lo que se encargará de cobrar las rentas de alquiler, de contratar los servicios, del mantenimiento de los inmuebles y de atender las incidencias que puedan surgir.
Además, ha precisado que, para los nuevos inquilinos de estos inmuebles, se fijará una renta de alquiler que ascenderá como máximo al 30% de los ingresos anuales ponderados de la persona o unidad familiar, que se calcularán conforme a la normativa sobre viviendas de protección oficial.
La duración de los contratos de alquiler será de un máximo de tres años. Al finalizar dicho periodo, Alokabide entregará las viviendas a Kutxabank en el mismo estado de conservación en que fueron recibidas.
La entidad ha precisado que las viviendas cedidas por Kutxabank estarán listas para "entrar a vivir". Todas contarán con cocina equipada y con electrodomésticos en perfecto funcionamiento, en cumplimiento de los estándares de habitabilidad exigidos por Alokabide. Asimismo, estarán dadas de alta en los suministros básicos de agua gas y electricidad.
Kutxabank ha señalado que realizará un "importante esfuerzo" a la hora de ceder a Alokabide edificaciones de nueva construcción. De hecho, los 30 primeros pisos que se entregarán están sin estrenar. Se trata de domicilios de 2 y 3 habitaciones principalmente, con superficies que oscilan entre los 40 m2 y los 90 m2.
Todos las viviendas estarán ubicadas en términos municipales o comarcas de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa en los que exista "una elevada demanda y poca oferta de vivienda pública en alquiler".
Según se establece en el contrato suscrito por la entidad financiera y la sociedad pública, las viviendas serán cedidas a Alokabide en régimen de usufructo.
En función de la tipología del inmueble y de las condiciones económicas de los solicitantes, el precio máximo de las cesiones estará fijado en los 400 euros, cantidad en la que se incluyen los gastos de comunidad, el IBI y los gastos de gestión del convenio. Los precios se revisarán anualmente conforme a la variación del IPC publicado por el Instituto Nacional de Estadística.
CONVENIO
El banco ha subrayado que el convenio de colaboración suscrito por Alokabide y Kutxabank pretende complementar los diferentes programas que ambas partes han puesto en marcha en los últimos años con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda en alquiler de aquellas familias que se encuentren en una situación de "mayor vulnerabilidad".
En este sentido, ha destacado que el Departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco ha acometido una "decidida" intervención pública para poner en el mercado viviendas deshabitadas o vacías con destino a las unidades familiares que no pueden hacer efectivo "su derecho a disfrutar de una vivienda digna y adecuada".
En concreto, ha puesto en marcha diferentes programas y sistemas de cesión a operadores públicos, como es el caso de la Sociedad Pública Alokabide, S.A., a través de la gestión del 'Programa de Vivienda Vacía', y también medidas financieras para la movilización de vivienda libre de nueva titularidad de promotores, con el objetivo de otorgar preferencia máxima para el acceso en régimen de alquiler a aquellas personas que se encuentren en situación de desempleo sobrevenido y pierdan sus viviendas en propiedad como consecuencia de un proceso de ejecución hipotecaria.
Kutxabank ha añadido que su compromiso con este tipo de programas tiene "claros y recientes antecedentes". Según ha recordado, en 2012, la entidad fue una de las primeras en acogerse al 'Código de Buenas Prácticas' del Gobierno y manifestó su adhesión al Plan de Mediación promovido por el Gobierno vasco.
Además, Kutxabank también diseñó un programa propio, el programa 'Etxelan', dirigido a la inserción socio laboral y al acceso a viviendas subvencionadas de personas y familias situadas en el umbral de la exclusión social, en colaboración con entidades sin ánimo de lucro.
Asimismo, ha subrayado que mantiene una posición de "máxima flexibilidad y de búsqueda de soluciones" con aquellos clientes que encuentran problemas para hacer frente a sus compromisos hipotecarios.
En este sentido, ha apuntado que en 2013 renegoció las condiciones de más de 8.000 préstamos hipotecarios suscritos por personas y familias en dificultades, a quienes se les ofreció la posibilidad de solicitar carencias en el pago de la amortización de créditos o ampliaciones de plazos para hacer más llevaderas las cuotas.
Asimismo, ha aportado 150 pisos al Fondo Social de Viviendas constituido por el Gobierno de España. Estas viviendas son ofrecidas a personas que, tras haber sido desalojadas de su vivienda habitual por impago de un préstamo hipotecario, se encuentren en situaciones de especial vulnerabilidad social.
