El regidor de Santiago considera necesario que se "replantee" el actual modelo de lucha contra incendios
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Oia, el popular Alejandro Rodríguez, hizo hoy uso de la ironía en su comparecencia en la Comisión de Estudo de las causas de los incendios para proponer la denominación de "Consellería de Medio Queimado" para el departamento que dirige Alfredo Suárez Canal, en el caso de que decida mantener su "ineficaz" operativo de extinción.
En una intervención en la que criticó el "descontrol, la inexperiencia y la descoordinación" de los efectivos de lucha contra incendios de la Xunta en la oleada de fuegos del 4 al 15 de agosto, Alejandro Rodríguez ironizó con que, "de seguir así", el próximo año enviará al presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, "otra" misiva --le envió una a finales de agosto en la que denunció estos hechos-- en la que le pedirá que personas "apolíticas" sean las que dirijan la "Consellería de Medio Queimado, donde el Ayuntamiento de Oia seguro que tendrá acogida".
El regidor popular no sólo se mostró crítico con el dispositivo de extinción, sino con la actitud de la Administración gallega durante la crisis incendiaria. Así, aseguró que el Ayuntamiento de Oia se sintió "tremendamente despreciado" por parte de la Xunta, ya que recriminó que "no recibió ni una sola llamada" ni de Presidencia ni de ninguna consellería en los cuatro días que vivieron "pánico, terror e impotencia".
Alejandro Rodríguez no reprobó únicamente la actitud mostrada por la Administración gallega, sino también por los parlamentarios, a los que recriminó que "sólo se hayan dedicado a criticar" a los alcaldes, "que estuvieron en los incendios, mientras los diputados estaban de vacaciones, merecidas o no".
"Deberían dimitir todos, o casi todos, aunque no se quienes no", reconoció, al tiempo que aprovechó también para censurar los "intolerables insultos y falsedades" del director xeral de Montes, Alberte Blanco, contra l68 alcaldes populares, "que supone insultar a los vecinos de estos municipios que fueron los que realmente ganaron la batalla contra el fuego, jugándose su vida".
DESASTRE EVITABLE
Para el regidor de Oia, la "falta" de medios, vigilancia, brigadas y motobombas fueron las que provocaron la "catástrofe" de la crisis incendiaria del 4 al 15 de agosto y que arrasó 78.000 hectáreas y que, en este municipio, supuso unas pérdidas de seis millones de euros.
"Este desastre se pudo evitar con los modestos medios que incluso habíamos solicitado", reprochó el regidor pontevedrés, quien comparó esta catástrofe con la de Prestige para demandar que, al igual que con la marea negra, "cobre cada uno de los gallegos que tuvieron pérdidas".
ALCALDE DE SANTIAGO: "NADA QUE VER CON OTROS AÑOS"
Por contra, el alcalde de Santiago, el socialista Xosé Sánchez Bugallo, atribuyó que el equipo de extinción "no estuviese preparado" para hacer frente a la ola de incendios de agosto "a que lo que sucedió nada tuvo que ver con otros años".
Así, recordó el número elevado de incendios, con cinco diarios en la capital gallega, y que se iniciaron la mayoría en las casas (95%) y se desplazaban al monte "y no al revés, como ha sido siempre habitual".
"Lógicamente la eficacia de un servicio está marcada porque se puede concentrar muchos medios en poco tiempo", resumió Bugallo, quien explicó que en la crisis incendiaria el "problema" surgió al "complicarse" la situación, al tener que hacer frente los efectivos con varios incendios al mismo tiempo --en Santiago hubo jornadas con siete a la vez-- lo que obligó a "dividir" efectivos. "Hubo que abandonar fuegos para concentrar la actuación donde se producía el riesgo", argumentó.
De este modo, indicó que la multiplicación de incendios y la amenaza directa a vidas, obligó a concentrar efectivos y a sacrificar zonas que no ofrecían riesgos evidentes para las personas o inmuebles.
REPLANTEARSE EL MODELO
No obstante, el alcalde de Santiago consideró "necesario" que se "replantee" el actual modelo de lucha contra incendios, ya que advirtió de que el existente estaba previsto para unas circunstancias para las que "podía tener eficacia".
Sin embargo, recordó la singularidad de los fuegos de la primera quincena de agosto, "y si no se cambia, pueden volver a pasar cosas parecidas, si se reproduce una oleada como esta", alertó.
