Rural.- El brigadista de Ourense detenido levantó sospechas entre los vecinos al comprar una garrafa de gasolina

Actualizado: lunes, 14 agosto 2006 19:55

OURENSE, 14 Ago. (EUROPA PRESS) -

La detención de Justo Pascual Díaz, miembro de una brigada de extinción y presunto autor de un incendio en Bobadella (Ourense), fue posible a que su compra de una garrafa de gasolina levantó sospechas entre dos jóvenes, que contaron con la colaboración de otro vecino, Juan Manuel Fernández, para retenerlo mientras no llegaba la Policía.

En declaraciones a Europa Press Televisión, Juan Manuel Fernández, aseguró hoy que el detenido, de 38 años de edad, estaba "vestido de bombero" y explicó que el presunto incendiario se había parado, pasada la una de la madrugada, delante su casa para preguntarle a su madre, María del Carmen Domínguez "por dónde se iba a un incendio" que se registraba en ese momento en un monte cercano.

En declaraciones a Europa Press Televisión, María del Carmen Rodríguez --quien reconoció que vivió esa noche "con muchos nervios", pero que ahora se encuentra "muy contenta" por haber ayudado a la detención-- explicó que, a continuación, "aparecieron dos chicos" preguntando por dónde se había ido el brigadista, ya que "llevaba una lata de gasolina".

Estos chicos habían coincidido con el presunto incendiario en una gasolinera mientras "estaba repostando". A continuación y tras llamar a la Policía, que procedió a cortar el paso de las calles del barrio de ourensano de Bobadella para que el presunto incendiario no pudiera escapar, Juan Manuel Fernández se encontró con el hombre, que bajaba de un monte cercano en coche. En ese momento, Juan Manuel procedió a retenerlo, hasta que llegaron los agentes de la Policía.

LE INTENTÓ CONVENCER DE QUE SE CONFUNDÍA

Juan Manuel explicó que Justo Pascual Díaz le intentó convencer de que "se confundía" al decir que "él trabajaba en las brigadas contra incendios". Juan Manuel no le creyó a pesar de que estaba "vestido de bombero", con "polo azul y rayas roja, pantalón azul militar, botas y gorra".

Juan Manuel declaró que "gracias a los jóvenes" que lo vieron en la gasolinera cercana, "le cogieron la matrícula y lo siguieron", él lo pudo retener hasta la llegada de los agentes.

El detenido se trata de Justo Pascual Díaz, de 38 años y natural de Venezuela, que, en el momento de la detención, llevaba oculto en el maletero de su coche, además de una garrafa de gasolina, diluyentes sintéticos y varios mecheros. Justo Pascual Díaz pertenece al servicio de extinción de la Xunta de Galicia desde hace cuatro años, aunque en ese momento, estaba fuera de servicio.