Rural.- Las tareas de regeneración del monte quemado tendrán en cuenta las zonas más afectadas por la escorrentía

Actualizado: miércoles, 25 octubre 2006 21:09

PONTEVEDRA, 25 Oct. (EUROPA PRESS) -

Las labores de regeneración del monte afectado por los incendios continúan su ritmo, según el jefe del servicio provincial de Montes e Industrias Forestales en Pontevedra, Jesús de la Fuente. Los trabajos se reorientarán a las zonas "donde más efecto están teniendo las riadas", según de la Fuente, entre las que citó Oia, Poio, Pontesampaio o Verducido, en Pontevedra, "cuando las pistas ahora intransitables permitan el acceso".

Con respecto a la eficacia de los trabajos de regeneración del suelo ante el temporal del lluvia, Jesús de la Fuente explicó que "con 725 litros por metro cuadrado desde el uno de octubre, no hay trabajo que contenga la totalidad del agua". Así, "donde comenzó a crecer la vegetación, la lluvia empezó a infiltrarse".

Por la contra, "donde no hay vegetación", indicó Jesús de la Fuente, "se produce la movilización de material líquido y sólido", parte del cual queda en las barreras de contención creadas por las cuadrillas. Para el jefe provincial de Montes, "en vez de cordones de vegetación cada cinco o diez metros, como se hizo, harían falta cada metro, lo que sería imposible e inviable económicamente".

De la Fuente calcula que hasta el momento se ha trabajado en la regeneración de unas 400 hectáreas de terreno ardido, frente a las 800 hectáreas en las que calculaban haber actuado de cara al mes de noviembre. "La naturaleza de estas lluvias impide que la eficacia sea la deseada", lamentó Jesús de la Fuente, aunque "en las zonas trabajadas la erosión es menor".

El jefe provincial de Montes en Pontevedra descarta que haya vinculación entre el alcance de los daños causados por las riadas y la situación en la que quedaron los montes tras los incendios. "Cuando llueve tanto el suelo se satura", explicó Jesús de la Fuente. En esta circunstancia, según dijo, se escurre el 90 por ciento del agua que cae, tanto si el terreno está quemado como si no ha ardido.