El nacionalista advierte de que el PGOM "será uno de los temas a definir"
VIGO, 28 May. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PSdeG en Vigo, Abel Caballero auguró hoy una alianza "éxito atronador" junto al BNG para gobernar la ciudad los próximos cuatro años, mientras que el candidato nacionalista, Santiago Domínguez, se mostró cauto ante esta posibilidad y habló de "hipotética coalición".
En una rueda de prensa, Domínguez afirmó estar "dispuesto" a pactar siempre y cuando se garantice el respeto a su formación y se antepongan los intereses de la ciudad a los de partido. Según informaron, a pesar de que hoy mantuvieron una conversación telefónica para felicitarse, todavía no han concretado una fecha de reuniones para intentar llegar a un acuerdo de gobierno.
Así, el aspirante socialista abogó por un modelo bipartito, al igual que ocurre en la Xunta, aunque destacó que, a pesar de que este sistema es "bueno", Vigo desarrollará su propio modelo, "un gobierno de progreso y entusiasmo" que, además, "hará historia en la ciudad" con proyectos en grandes infraestructuras como el AVE, las autovías o el impulso del puerto, aeropuerto, que realizará inversiones en barrios y parroquias.
Asimismo, destacó que, a lo largo de la campaña, el PSdeG fue "especialmente respetuoso" con el bloque y afirmó que lo seguirá siendo con ésta y las demás formaciones políticas, y, en el caso del BNG, destacó que desde este respeto "se sentarán las bases para la perfecta convivencia" de ambas.
Caballero también recalcó que, un día después de la cita electoral, habrá que comenzar a trabajar "sin prisa pero sin pausa", por lo que próximamente comenzarán los contactos con el BNG para negociar los términos de un acuerdo que, según vaticinó, "será un gobierno que se constituirá pronto y bien" ya que las propuestas de ambos "son bastante coincidentes".
Además, Caballero se dirigió a la alcaldesa en funciones, la popular Corina Porro, para que "no se cree falsas expectativas", ya que, pese a haber logrado cuatro concejales menos que ella, su opción cuenta con el "entusiasmo de la ciudad" e incluso se mostró confiado en que un bipartito de izquierdas "dure más de cuatro años".
También destacó que los interlocutores del BNG y PSdeG tiene una capacidad de diálogo "superior a otros momentos", en referencia al Gabinete promovido tras las municipales de 2003, que rompió a los seis meses.
BNG
Por su parte, Santiago Domínguez aseguró que Caballero será el próximo alcalde de la ciudad y, aunque se mostró precavido a la hora de hablar de "una hipotética coalición" ,aseguró que le BNG acudirá a la convocatoria del PSdeG "con la predisposición de llegar a un acuerdo". Por ello, rechazó "ningún prejuicio de antemano" siempre y cuando se antepongan las necesidades de la ciudad a los dictámenes partidistas.
Así, el nacionalista aseguró que la ciudad tendrá un alcalde socialista el próximo 16 de junio "esté el BNG en el gobierno o no", por lo que respaldará al socialista cuando se constituya la nueva Corporación. "Pero por el momento no puedo decir nada más", aseveró al respecto de si, tras mantenerse las conversaciones, fraguará finalmente un pacto de gobierno.
Antes de iniciar los contactos, Domínguez afirmó que se reunirá con la Ejecutiva del BNG, con la que analizará la situación en profundidad y definirá "las estrategias" a seguir. En cuanto al Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) de la ciudad, Domínguez destacó que "si se quiere llegar a un pacto, el proyecto de ciudad será uno de los temas a definir".
Así, consideró que el documento actual "es el mejor" y esperó que actualmente, "una vez pasadas las presiones electorales" se pueda llegar a su aprobación definitiva. En todo caso, se mostró favorable a realizar alguna modificación mientras no se varíen los aspectos básicos.
EVALUACIÓN DE RESULTADOS
En cuanto a la evaluación de los resultados de las elecciones, Caballero destacó que los datos confirman al PSdeG como el "claro ganador" en Vigo y se mostró satisfecho por haber aumentado en cuanto a porcentaje de votos en un edil respecto al anterior mandato.
Además, también se refirió a la pérdida de la representación municipal del Partido Galeguista de Manoel Soto, que no obtuvo ningún concejal, y afirmó que la circunstancia de que haya tres formaciones en el Ayuntamiento redundará en una "mayor claridad en el escenario político vigués" que lo liberará de, según él, "las interferencias" de otros partidos.
Por su parte, Domínguez Olveira admitió que los cinco concejales "no son un buen resultado" puesto que, a lo largo de la campaña, el BNG contaba con unas mayores expectativas. Sin embargo, concluyó que a pesar de que en Vigo perdieron dos ediles, la formación frentista registró un "avance" en algunos puntos de Galicia, como por ejemplo en determinados puntos del rural en los que "era difícil la implantación".
