Más de 400 personas rinden homenaje a los represaliados durante la Guerra Civil y el franquismo en la Illa de San Simón
VIGO, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
La conselleira de Cultura, Ánxela Bugallo, reivindicó hoy el compromiso de la Xunta de hacer "todo lo posible" por la recuperación de la memoria histórica de lo acontecido durante la Guerra Civil y en los años posteriores, y confirmó que 2006 será el año "de la memoria, la justicia y la dignidad", en homenaje a los represaliados del franquismo.
Así lo proclamó en su intervención el acto de apertura de la programación del 'Ano da Memoria' en la Isla de San Simón (Pontevedra), donde estuvieron encarceladas más de 5.000 personas desde 1936, y que reunió a más de 400 personas, entre ellos asociaciones por la recuperación de la memoria, supervivientes y familiares de la represión franquista.
Los escritores Xosé Neira Vilas, Salvador García Bodaño, Marga do Val, Claudio Rodríguez Fer y Xesús Rábade abrieron el evento con un recital poético, que finalizó con la intervención de la escritora Mariví Villaverde, que estuvo exiliada durante la época franquista.
La conselleira de Cultura, que intervino a continuación, recalcó la importancia de iniciar en San Simón el homenaje que la Xunta dará a los represaliados, y destacó que esta isla, en la que se ubicará el 'Centro da Memoria' y que albergará una exposición permanente, será desde hoy "la isla de la justicia".
Ánxela Bugallo anunció que, a lo largo de este año, la administración autonómica apoyará todas aquellas iniciativas de investigación y creación audiovisual encaminadas a "sacar a la luz" todo lo que tenga que ver con esa época. Además, explicó que se organizarán varias muestras que recorrerán toda Galicia y un congreso que celebrará precisamente en la isla de San Simón durante el mes de octubre.
SUPERVIVIENTE
Tras los discursos, Manuel Barros, antifranquista y antiguo preso en la isla, explicó a los asistentes al acto cómo era la vida en el presidio, así como el uso de los diferentes edificios que allí se conservan y que fueron restaurados por el arquitecto César Portela.
Barros señaló que, a pesar de que "e han borrado" muchos de los signos de la cárcel que hubo allí, es "doloroso" recordar lo ocurrido en San Simón, donde los piojos, el hambre, el frío y las enfermedades acompañaron a los presos durante años.
Los actos se cerraron con una ofrenda floral que tuvo lugar en el islote de San Antonio, unido a la isla principal por un puente de piedra, y donde se llevaban a cabo los fusilamientos. Junto al muro de lo que fue el cementerio se depositó una corona de claveles, mientras el gaiteiro Xosé Manuel Budiño interpretó varias piezas, entre ellas, el himno del antiguo Reino de Galicia.
