En los cinco primeros meses 42 personas fallecieron en 39 accidentes de tráfico, frente a las 27 víctimas en 27 siniestros el año pasado
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -
La siniestralidad viaria ha aumentado en mayo en Galicia al cerrarse con 12 personas fallecidas en nueve accidentes de tráfico, frente a las nueve víctimas en nueve siniestros en el mismo mes de 2018, lo que supone un 33,3% por ciento más de muertos en siniestros.
Según los datos facilitados por la Dirección General de Tráfico (DGT), A Coruña ha sido la provincia en la que se registró el pasado mes de mayo un incremento del 75% de las víctimas mortales, al pasar de cuatro en 2018 a siete este 2019, mientras que en Pontevedra se mantuvieron tres fallecidos, uno en Lugo y uno en Ourense, como hace un año.
En cuanto al número de accidentes con fallecidos registrados en la red viaria gallega el pasado mes, aumentaron en un 50% en la provincia de A Coruña --de cuatro a seis-- y descendieron un 66,7% en la de Pontevedra --de tres a uno--. Por su lado, en Lugo y Ourense se mantuvo la cifra en uno en cada caso.
De los 12 accidentes de tráfico registrados el pasado mes de mayo en la Comunidad gallega, cuatro fueron colisiones; tres, salidas de vía; dos atropellos y uno, un vuelco, mientras que los otros dos se enmarcan en "otros tipos", indica la DGT en su balance.
En cuanto a las edades de las víctimas mortales, tres de los muertos en la red viaria gallega el pasado mayo tenían entre 15 y 24 años; cuatro se situaban entre los 25 y 34 años; tres, entre los 35 y 64; y dos fallecidos eran mayores de 65.
ENERO-MAYO
En lo que va de año, entre enero y mayo, 42 personas fallecieron en 39 accidentes de tráfico en Galicia, frente a las 27 víctimas en 27 siniestros en el mismo periodo de 2018.
Estos datos suponen un incremento del 55,6 por ciento del número de muertos en la red viaria gallega entre enero y mayo de 2019 y un aumento del 44,4% en siniestros mortales.
En cuanto a las personas fallecidas, en la provincia de A Coruña pasaron de 15 a 19; en Pontevedra de cuatro a 13; en Lugo, de tres a cinco; y en Ourense se mantuvo la cifra en cinco.
