El BNG advierte de que "el tiempo corre en contra del alcalde" de Lugo para llegar a un pacto con los nacionalistas

Actualizado: lunes, 14 julio 2008 19:39

LUGO, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -

El BNG de Lugo advirtió hoy de que "el tiempo corre en contra del alcalde", el socialista José Clemente López Orozco, a la hora de intentar llegar a un pacto con los nacionalistas en la ciudad, después de que el ex edil de Urbanismo y presidente de la Confederación Hidrográfica del Miño, Francisco Fernández Liñares, sostuviese que "tiene que darse un pacto con el BNG, no sé si ahora o más adelante".

Ante estas palabras de Liñares, la nacionalista Paz Abraira consideró que "le toca mover turno a un Gobierno en minoría que busca estabilidad", en referencia al Ejecutivo del PSOE, tras lo cual recordó que "al BNG no se dirigió nadie desde el pasado mes de junio para plantear ningún cambio".

La nacionalista manifestó que en "no aceptar un acuerdo de gobierno con el BNG" tuvo "mucho que ver" el propio alcalde, al que advirtió de que "el tiempo no corre a favor para que se establezca un pacto conforme avanza la legislatura", tras lo cual añadió que "nada juega a favor de un pacto de Gobierno".

A preguntas de los periodistas, insistió en que "el momento del pacto es una vez que se celebraron las elecciones". "Lo natural es negociarlo en su momento", reiteró, para denunciar que ni Orozco ni su equipo de Gobierno ni su partido quisieron llegar a un acuerdo que provoca que hoy la ciudad tenga un Gobierno "sin proyectos, sin iniciativas y centrado en las sonrisas del alcalde" que pueden llevar a situaciones "poco positivas".

Así, Abraira concluyó diciendo que le corresponde a quien tiene "un Gobierno inestable" buscar apoyos para convertirlo en un equipo fuerte. Con todo, "las propuestas del BNG siguen ahí", concedió.

POLICÍA

Por su parte, también el PP se pronunció sobre la entrevista en la que Fernández Liñares aseguró que "no hubo un momento de suficiente madurez para hablar con la Policía", pero que en cuanto el alcalde "se ponga en serio" podrá arreglar "los flecos pendientes". Además, confió en que López Orozco "sepa valorar" el rechazo de la persona que ocupa el puesto de director general de la Policía.

Al PP "ya no le sorprende" que Liñares, que fue "mano derecha del alcalde" y "con responsabilidades en materia policial", reconozca "ahora que no tiene ninguna relación con el equipo de Gobierno" y que el alcalde "no se ha tomado en serio el tema de la Policía". El concejal popular Enrique Rozas aseguró que los lucenses "no tienen por qué pagar" la "soberbia" y la "prepotencia" del regidor socialista.

Rozas resaltó que Darío Diéguez, el director general de la Policía, "no tiene apoyo suficiente" y que "no sabe por qué sigue ahí", dado que su única labor fue abrir cuatro expedientes. Además, culpó a Diéguez de la "sangría económica" que supone al ayuntamiento sus decisiones respecto al funcionamiento de la grúa.

Ante todo ello, los populares reclamaron "seriedad, sensatez y cordura" para solventar "de una vez por todas" esta situación. Al mismo tiempo, denunciaron que el mal funcionamiento de la Policía, por "la mala planificación" de Diéguez, se vio reflejado en la ausencia del turno de atestados el pasado fin de semana y en que no se realizaron controles de velocidad ni de alcoholemia desde el viernes.