El procesado admite que "no tenía una buena relación" con la familia de su novia pero afirma que se enteró del fuego cuando fue detenido
PONTEVEDRA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La Sección Segunda Audiencia Provincial ha dejado este martes visto para sentencia el juicio contra un vecino de Lalín (Pontevedra) acusado de un delito de incendio con peligro para la vida, para el que la Fiscalía pide cinco años de prisión por plantar fuego a una vivienda habitada.
El fiscal redujo su petición inicial de penas de diez a cinco años de prisión para Tito C.G., al que acusa de haber prendido fuego a la casa de Alejandro R.F., hermano de su pareja en aquel entonces. Los hechos ocurrieron el 1 de agosto del año 2007, por lo que el fiscal ha reconocido la existencia de dilaciones indebidas en la resolución de esta causa.
Durante el juicio, el acusado ha explicado que aquella noche estuvo de copas por Santiago de Compostela con unos amigos, entre ellos la que hoy en día es su cónyuge y un amigo ya fallecido. A primera hora de la mañana, sobre las 8,30 horas, volvió a Lalín, ya que tenía que firmar en el juzgado debido a una orden de protección contra él.
El procesado ha reconocido que "no tenía una buena relación" con la familia de su novia, entre ellos con uno de sus cinco hermanos. Sin embargo, ha negado haberle amenazado y rechazó la acusación que se plantea contra él. "Me enteré del incendio cuando fui detenido", ha afirmado.
Por su parte, el hermano de su entonces novia ha insistido en que, delante de toda su familia, el acusado le había amenazado con quemarle la casa con él dentro. Este hombre aseguró que aquel día, se encontraba en su vivienda con su hija de siete años y su mujer acababa de marcharse al trabajo cuando les sorprendió "una gran llamarada" en el exterior de la vivienda.
"Al salir pude ver a tres personas corriendo. A uno lo reconocí por la voz y me pareció Tito, aunque a día de hoy no podría asegurarlo con rotundidad", ha relatado al tribunal. "Además pude ver dos coches, uno de ellos de color rojo", como uno de los vehículos propiedad del acusado, ha añadido.
Según su relato, inmediatamente cogió a su hija pequeña y salió de la casa con su coche en persecución de los asaltantes, pero no consiguió darles alcance.
"PELIGRO ABSTRACTO"
La Guardia Civil y peritos han señalado el incendio se produjo en un muro exterior de la casa y no afectó a la estructura principal de la vivienda "gracias a la pronta intervención de los propietarios que evitaron la propagación del fuego", por lo que el fiscal afirmó que existía un "peligro abstracto".
El letrado de la defensa, por su parte, intentó vincular con este caso un segundo incendio que sufrió Alejandro R.F. días después en el que resultó calcinado su vehículo privado, un Porsche valorado en más de 70.000 euros.
Ese hecho ya fue juzgado, resultando condenados dos hombres que sostuvieron que se equivocaron de víctima, porque alegaron que el ataque no iba dirigido a él.
